El juez Manuel Penalva, titular del juzgado de instrucción número 12 de Palma, ha dejado en libertad a uno de los policías locales que estaba en prisión por su implicación en la trama corrupta. Esta decisión la adoptó el pasado martes, el mismo día que tomó declaración por segunda vez al policía Joan T., antiguo integrante de la Patrulla Verde, que llevaba dos meses en prisión acusado de extorsionar a empresarios nocturnos de Palma.

Esta declaración, en la que el agente estuvo asistido por su abogado, Daniel Castro, se celebró a petición del propio funcionario, que desde el principio había negado que hubiera obtenido dinero de forma irregular a través de presiones a estos empresarios.

Su ingreso en prisión lo había decidido el juez, a petición del fiscal Miguel Ángel Subirán, porque este policía había sido identificado a través de un reportaje fotográfico que mostró la Policía a uno de los testigos protegidos. Esta persona reconoció, "sin ningún género de dudas" a varios agentes de la Patrulla Verde que estuvieron realizando de forma constante e injustificada inspecciones en su local. Y precisamente sobre Joan T. declaró que fue el policía local que le sancionó en más ocasiones "sin motivo alguno". El testigo insistió en que siempre le mostraba a este funcionario la misma documentación y lo hacía en cada inspección. Consideraba que los documentos estaban en regla. Y a pesar de ello se le sancionaba por cualquier motivo. Destacó también el testigo que el policía local ahora puesto en libertad siempre se mofaba de él "cada vez que le proponía para una sanción". A diferencia de otros policías, los investigadores no cuentan con ninguna prueba que demuestre que Joan T. hubiera cobrado dinero de los empresarios. De hecho, no se le acusaba de cohecho, sino solo de extorsión, ya que se ha demostrado que acompañó a otros policías que sí exigían dinero a estos empresarios nocturnos.

El agente ha decidido ahora colaborar con la investigación y ello ha facilitado su puesta en libertad. Sigue negando que él formara parte de esta trama corrupta de policías locales de Palma, pero ha aportado nuevos datos a la investigación que implican todavía más a varios de sus antiguos compañeros, muchos de ellos todavía en prisión.

Algunos datos que ha aportado este nuevo colaborador de los investigadores no se conocían hasta el momento, pero confirman lo que ya se sabía, que varios agentes de la Policía Local exigían dinero a empresarios de la ciudad para impedir que se realizaran inspecciones en sus locales y evitar al mismo tiempo que se propusieran sanciones, incluidas el cierre. Al mismo tiempo, si aceptaban las presiones de estos funcionarios de Cort, la Policía Local acosaba a otros locales de su competencia, que veían cómo las inspecciones, la mayoría de ellas injustificadas, se iban repitiendo constantemente, sobre todo en los momentos del día en los que había más clientela, con el perjuicio económico que ello suponía para el empresario que se negaba a aceptar estas exigencias.

El agente reconoció ante el juez que hasta hace poco no ha sido consciente de la gravedad de la actuación de sus compañeros e insistió en que no sabía que estaban exigiendo dinero a los empresarios. Se da la circunstancia de que hace pocas semanas la Audiencia de Palma había confirmado la decisión del juez Penalva de enviar a la cárcel a este policía. En estos momentos hay diez agentes en prisión.