Acabar con la "dictadura del coche" es uno de los retos que se plantea el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad. Un documento urbanístico cuyo avance fue aprobado en 2014 por el anterior equipo de gobierno del PP y que el actual pretende tener listo a nivel de aprobación inicial del planeamiento "en el primer semestre del próximo año", según manifestó el teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Antoni Noguera, justo antes de que se produzca el relevo previsto en la alcaldía.

El nuevo documento urbanístico, en palabras del director general Biel Horrach, debe dar respuesta a los retos a los que se enfrenta la ciudad en estos momentos provocados por la triple crisis: económica, social y ambiental. Por ello, ya no se puede concebir un Plan General como una simple sucesión de previsiones meramente urbanísticas, sino que se tienen que tener en consideración los anteriores parámetros para darles respuesta también desde el planeamiento urbanístico.

Precisamente con este objetivo se han realizado, con la colaboración del Colegio de Arquitectos de Balears y la UIB, las primeras jornadas denominadas Estratégia de modelo de ciudad: tejiendo complicidades realizadas los días 17, 18 y 21 de diciembre y cuyas conclusiones se dieron a conocer ayer.

El presidente de la Demarcación de Mallorca del Colegio de Arquitectos, Ignacio Salas, afirmó que Palma es una ciudad "con mucho margen de mejora", por lo que apostó por un Plan General "renovador y que funcione por muchos años". Para Salas, también es importante romper con lo que denominó "la dictadura del coche", un medio de transporte que ocupa mucho espacio público a costa de los peatones. Lo anterior es imprescindible si se quieren resolver los actuales problemas de movilidad que padece la ciudad, además de conquistar los espacios públicos y mejorar la eficiencia energética. Al respecto Biel Horrach recordó que la experiencia de Barcelona indica que la ocupación del espacio público por el vehículo privado es del 70 por ciento y que, con las medidas adoptadas , se ha conseguido reducirlo en un 17%.

Una de las experiencias que más éxito ha tenido ha sido la de compartir vehículo privado, lo que ha conseguido reducir la ocupación del espacio público por el vehículo privado entre 8 y 15 veces.

Para Salas, "el urbanismo y la arquitectura moderna deben estar comprometidos con la economía, el medio ambiente y los aspectos sociales".

Por su parte, el teniente de alcalde de Model de Ciudad, Urbanismo y Habitatge Digne, Antoni Noguera, aseguró que con estas jornadas "trabajamos para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos".

Poderes fácticos y económicos

Noguera afirmó que "el Urbanismo ha estado controlado por los poderes fácticos y económicos, pero ha llegado el momento de apostar por la economía urbana, por una economía creativa y la transculturalidad ciudadana para que Palma se convierta en una ciudad más habitable y más amable".

Por su parte, el vicerrector de Innovación de la UIB, Jordi Llabrés, también presente en la rueda de prensa, destacó que "queremos que Palma sea el primer mostrador del conocimiento que se genere en la Universitat" y se mostró partidario de realizar "proyectos estratégicos de largo recorrido".

Por último, Biel Horrach, afirmó que desde el Ayuntamiento de Palma "se está trabajando para acabar con grandes vacíos en el Moll Vell y la zona de Llevant, acabando con la dispersión de los usos en la ciudad, además de aumentar los espacios públicos y las zonas verdes".