Satisfecho y agradecido. Así se mostró ayer el tenista mallorquín Rafel Nadal durante la inauguración del primer centro de su fundación, una instalación que está dedicada a formar a niños de familias sin recursos o en riesgo de exclusión social. La educación y el deporte son los dos pilares del centro, que ya funciona desde hace dos meses pero que todavía no había sido presentado al público.

Puntual como un reloj suizo, Nadal llegó a la una de la tarde para recibir a las numerosas autoridades que quisieron ver el inmueble, situado en la barriada de Nou Llevant. Los presidentes de Govern y Consell y el alcalde de Palma acudieron al acto, así como otros concejales y exconcejales del Ayuntamiento.

Cinco salas y un gran patio exterior conforman las instalaciones. En el interior hay dos aulas con pupitres y pizarras para impartir clases de repaso, otras dos clases con mesas grandes para trabajos de grupo y una sala con espejos para talleres de expresión corporal. Fuera del edificio está el patio con una pista polideportiva para jugar a fútbol sala o baloncesto. Curiosamente, no está preparada para disputar un partido de tenis.

La responsable de integración social de la Fundación Rafa Nadal, Xisca Perelló, explicó que el centro realiza actividades de lunes a sábado. Entre semana los jóvenes acuden al centro entre las cinco y las siete y media de la tarde. Perelló agregó que el edificio estará abierto todo el año y que programarán talleres especiales para verano o las vacaciones de Navidad.

Durante una hora practican deporte, luego meriendan y finalizan la jornada con actividades de refuerzo escolar. De la parte formativa se encarga el personal de la Fundació Diagrama, compuesto por siete educadores, monitores y psicólogos. Un ejemplo de las actividades que realizan con los alumnos es el original árbol de Navidad, formado con libros y luces led que hay en el vestíbulo de la primera planta.

El centro da servicio actualmente a 140 niños de entre 6 y 16 años y tiene una lista de espera de otros 80 jóvenes más. "El 40% de los niños viene derivado por los servicios sociales, al resto les envían los colegios y las entidades de la zona", apuntó Perelló. Los jóvenes proceden de las barriadas de Nou Llevant, la Soledat, Foners y Pere Garau, una zona "un poquito problemática", según definió ayer el tenista.

La parcela de 1.500 metros cuadrados fue cedida por el Ayuntamiento de Palma hace poco más de un año, durante la etapa de Mateo Isern. El proyecto ha sido financiado con dinero privado, tanto del tenista como de otros socios y patrocinadores de la fundación.

Nadal señaló que es un proyecto "muy especial", porque fue él mismo quien eligió que el primer centro de su entidad se construyera en Mallorca. La fundación del tenista nació en 2008 y la preside su madre, Ana María Parera. El primer centro en España es el que inauguraron ayer tras desarrollar proyectos en la India y Estados Unidos. "Decidimos cambiar de rumbo y dedicarnos a España donde también hay niños con necesidades y más en una época de crisis económica", declaró el deportista manacorense.

Nadal detalló que el centro quiere "dar oportunidades a jóvenes y niños en riesgo de exclusión a través de la educación y el deporte", una actividad que lleva "asociados buenos valores como el respeto, el espíritu de superación y el compañerismo".