El Grupo Barceló no será el adjudicatario de la gestión del Palacio de Congresos y del hotel anexo. El consejo de administración de la sociedad pública que promueve la infraestructura congresual aprobó ayer, por unanimidad, "desistir" del proceso de adjudicación de su gestión, una vez analizados los contenidos de los informes emitidos por la Universitat y la abogacía de la Comunitat Autónoma sobre la legalidad del proceso seguido en el expediente de contratación tramitado a finales del pasado mandato.

Con este acuerdo, desde la sociedad pública Palau de Congressos se afirma que "se cierra definitivamente el procedimiento de adjudicación concluido el pasado 21 de abril, que quedó en suspenso por decisión del anterior equipo de gobierno municipal, por las dudas de legalidad que se plantearon".

Estas "dudas" fueron ratificadas en el informe solicitado por los actuales gestores a la UIB, que concluyó que la junta de gobierno del Ayuntamiento de Palma "no puede ni debe" ratificar la adjudicación propuesta por el consejo de administración de Palau de Congressos al Grupo Barceló, puesto que "en el procedimiento seguido se han cometido varias irregularidades, una de ellas constitutiva de un vicio de nulidad y otra consistente en un vicio de anulabilidad". En la misma sesión se aprobaron los presupuestos de Palau de Congressos para 2016, que incluyen ingresos y gastos de 10,2 millones de euros.

Por otra parte, ayer se iniciaron las reuniones entre los técnicos de Palau y Acciona con el fin de estudiar y valorar el nuevo calendario de finalización de las obras, tras la paralización anunciada unilateralmente por la constructora, que supuso que la obra estuviera "un día" parada, según Joana Maria Adrover. Acciona ha fijado para el día 24 de febrero la finalización de las obras.

Por su parte, el pleno instará, a petición del PP, a Cort y al Govern a negociar un nuevo calendario "sin renunciar a la penalización de 20.000 euros prevista en el contrato por cada día de retraso ni a la salvaguarda de los intereses públicos".