El alcalde de Palma, José Hila, y el vicepresidente y conseller de Turismo del Govern, Biel Barceló, se han mostrado este domingo confiados en que Acciona no paralizará las obras del Palacio de Congresos ya que consideran que "no tienen motivos" y señalan que la constructora puede tener que afrontar penalizaciones por retrasos.

Así lo han manifestado Hila y Barceló en declaraciones a IB3 Radio recogidas por Europa Press. El conseller de Turismo ha recordado los compromisos adquiridos por la constructora y ha pedido que se cumplan: "Nuestra idea es que las obras se tienen que acabar y Acciona no tiene ningún motivo para pararlas", ha dicho.

Barceló ha reflexionado sobre la posibilidad de que la estrategia de Acciona consista en "presionar por la indemnización que se le debe" por la parada de obras entre 2012 y 2013, pero ha indicado que "no tiene nada que ver con la certificación de obras, que es un tema que se tiene que aclarar, evidentemente".

Por su parte, Hila cree que la más interesada en acabarlas "cuanto antes" debe ser precisamente Acciona, porque "si ocurriese, aplicaríamos las penalizaciones correspondientes".

Según ha detallado el alcalde a la emisora autonómica, estas penalizaciones consisten, entre otras, en un pago de 20.000 euros por cada día de retraso.

Por ello, Hila se ha mostrado convencido de que "acabarán rápido" y el año que viene el Palacio de Congresos estará operativo, algo que "aportará crecimiento económico y empleo".

EL GOVERN, DISPUESTO A IR A LOS TRIBUNALES

La negociación será la primera baza del Govern si Acciona paraliza las obras, pero si ésta falla no descarta tomar la vía judicial. Así lo avanzaba este viernes el portavoz del ejecutivo, Marc Pons, que considera los tribunales una solución con la que "no saldría ganando nadie".

Pons, quien recordó que este asunto "no le toca solamente al Govern" porque "hay un espacio compartido con el Ayuntamiento de Palma de manera conjunta", insistió en que escucharían las peticiones "ligadas a una medida de fuerza como ésta".

Cabe recordar que, como anunciaba Barceló el pasado jueves, la misma Acciona ha corroborado que la fecha de entrega de la infraestructura será el 31 de diciembre de este año.

El conseller dijo entonces que no existe ningún problema financiero para que la Administración autonómica pueda hacer frente al final de las obras.