La elección del Defensor del Ciudadano, vacante desde hace tres años tras el fallecimiento de su primer y único titular, Miquel Lladó, enfrenta al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Palma con los grupos de la oposición del PP y Ciudadanos.

Tras el incumplimiento por parte del equipo de gobierno de los plazos comprometidos para la presentación de un posible candidato de consenso para ocupar la plaza, el grupo municipal de Ciudadanos se decidió a lanzar el suyo. Se trata del Tomás Garrido, expresidente de la pequeña y mediana empresa asociada a la Pimem, entre otros cargos. El Partido Popular se ha adherido a la propuesta de Ciudadanos, por lo que Garrido contaría en una hipotética votación con trece votos sobre los 17 necesarios (tres quintos del Consistorio)

Por su parte, desde el equipo de gobierno, integrado por el PSOE, Més y Som Palma, se ha propuesto para ocupar esta plaza vacante a Vicente Rodrigo, presidente de la Federación de Padres y Madres de Mallorca desde el año 2012.

En su faceta profesional Rodrigo es funcionario del Ayuntamiento de Palma adscrito a la oficina del Defensor del Ciudadano. Esta circunstancia, que podría suponer uno de los puntos fuertes de su candidatura, constituye un inconveniente, puesto que los partidos de la oposición, Ciudadanos y PP, ya han anunciado que no van a apoyarle, puesto que consideran más idóneo el perfil de Tomás Garrido como titular de la oficina del defensor de la ciudadanía.

En estas circunstancias, el equipo de gobierno tampoco dispondría de mayoría suficiente para proceder a la elección de Rodrigo en primera instancia, puesto que los tres partidos que conforman el gobierno municipal solo suman 16 votos. Por ello, si se mantiene la candidatura de Rodrigo, se debería ir a una segunda votación dentro de un mes, cuando ya solo sería necesaria la mayoría absoluta para la designación del nuevo defensor.

Además, según explicó ayer el teniente de alcalde Aligi Molina, se ha presentado otra candidatura de una ciudadana particular. Se trata la trabajadora social Yaiza Hernández, que ha presentado una instancia solicitando que la junta de portavoces tenga en cuenta su candidatura a la hora de tomar una decisión. Precisamente la junta de portavoces tiene previsto reunirse de nuevo el próximo lunes con el fin de intentar llegar a un acuerdo. Una posibilidad poco probable, puesto que los portavoces del PP, Margalida Durán, y de Ciudadanos, Josep Lluís Bauzá, no están dispuestos a apoyar la candidatura de Rodrigo.

Para Durán "el perfil de Tomás Garrido se ajusta más que el de Rodrigo a la figura del Defensor del Ciudadano, puesto que puede aportar experiencia". Igualmente, para Josep Lluís Bauzá, de Ciudadanos, la candidatura de Rodrigo no es adecuada, puesto que se trata de un funcionario que debería fiscalizar la labor de la administración. Además se pasará de disponer de una figura que no percibía remuneración a otra que sí la va a tener, puesto que deberá solicitar la comisión de servicios.

Por su parte, Vicente Rodrigo manifestó que estaría "encantado" de asumir esta responsabilidad y agradeció al equipo de gobierno que hayan pensado en su persona para el cargo.