El Ayuntamiento de Palma y el Consell de Mallorca están elaborando un plan de actuación que permita agilizar la limpieza de las pintadas que se producen en elementos o edificios declarados Bien de Interés Cultural (BIC) o Bien Catalogado.

La teniente de alcalde de Ecología y Bienestar Animal y presidenta de Emaya, Neus Truyol, afirmó que desde hace unos años desde la comisión de Patrimonio del Consell se ha dado orden de no actuar sobre las pintadas que se producen en edificios catalogados. De hecho, sólo se han autorizado limpiezas en el Baluard del Príncep, una zona de las antiguas murallas de la ciudad especialmente castigada por estos actos vandálicos.

Por ello, explicó que desde el Ayuntamiento se ha instado al Consell a la formalización de un protocolo de actuación que permita agilizar las autorizaciones que se deben dar desde la comisión del Patrimonio y poder actuar con un tiempo prudencial para restituir el bien patrimonial dañado.

Mientras tanto, desde Emaya, pese a que no se trata de una competencia del Ayuntamiento, y por una cuestión de ornato público, se procede a la limpieza de las pintadas que se realizan en las fachadas de edificios particulares no catalogados.

La empresa municipal destina a este cometido una brigada que, en lo que llevamos de año, ha limpiado 4.146 pintadas, con un coste para las arcas de la empresa pública de 180.000 euros.

Desde la concejalía de Ecología y Bienestar Animal hace semanas que se ha mantenido una reunión con responsables de Cultura del Consell, del Ayuntamiento, Emaya a la que también asistieron representantes de la Policía Local con el fin de abordar esta problemática.

Al respecto, Truyol adelantó que, en relación a los elementos catalogados, se está trabajando en la elaboración de un protocolo de actuación, que incluiría características de las superficies a tratar, los materiales y sistemas a utilizar para la supresión de la pintada, con el fin de agilizar la redacción de los correspondientes proyectos que deben ser aprobados por Patrimonio del Consell.

Un proyecto para cada caso

En estos momentos para cada pintada se debe elaborar un proyecto específico, hecho que retrasa muchísimo la posibilidad de intervenir tras la detección de la pintada. Este procedimiento ahora puede durar meses, y se pretende agilizarlo al máximo para que se pueda actuar en semanas. Según Truyo, por parte de los responsables del Consell están de acuerdo en la elaboración de este protocolo.

La cuestión de las pintadas en las fachadas en general y en elementos catalogados como el Baluard del Príncep o la biblioteca Ramón Llull fue debatida ayer en la comisión de Urbanismo y Medio ambiente a propuesta del grupo municipal del PP. La portavoz de este partido en Cort, Margalida Durán, presentó una proposición, que fue informada favorablemente por unanimidad, por la que el pleno del Ayuntamiento lamentara "el comportamiento incívico de los que infringen las ordenanzas municipales con pintadas y grafitis que afean y deterioran los espacios públicos, privados y el mobiliario urbano y suponen un importante desembolso para el presupuesto municipal".

Tras reconocer el esfuerzo que se realiza por parte de los servicios municipales para proceder a la limpieza de los espacios objeto de estos actos vandálicos, el pleno también instará al equipo de gobierno a aplicar un plan con el fin de erradicar o paliar este fenómeno, que incluirá "una batería de medidas educativas, preventivas, sancionadoras y de limpieza".