La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Palma, Marga Durán, opina que con la supresión del servicio de recogida a domicilio de trastos voluminosos las calles de la ciudad "se convertirán en un estercolero", por lo que tilda la medida anunciada hoy por Emaya de "gran paso atrás".

La eliminación del servicio de cita previa que prestaba la compañía municipal para la recogida de muebles viejos "implicará una merma importante en el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos, tanto desde el punto de vista de higiene y limpieza como de la imagen que obligatoriamente ha de ofrecer una capital de la dimensión turística de Palma", dijo la portavoz popular a través de un comunicado emitido a los medios de comunicación.

Para la líder de la oposición en el consistorio palmesano es un "despropósito" suspender un servicio que funcionaba desde hace años y cambiarlo por un sistema que supone la acumulación de residuos voluminosos en las calles durante varias horas, cuya recogida se efectuará una vez por semana en horario nocturno.

Durán declara que con esta línea de actuación de Emaya cabe preguntarse si la empresa pública municipal pedirá a los vecinos "que dejen también las bolsas de basura en la calle".

"Esta medida hará de Palma una ciudad más sucia y más descuidada y, además, no ayudará en absoluto a acabar con el problema de la acumulación de enseres abandonados en la calle o en los descampados", insiste la concejala del PP.