El Grupo Barceló, ganador del último concurso convocado para la explotación y gestión del Palacio de Congresos y de su hotel anexo, está "preocupado" y a la "expectativa" por el retraso en la decisión sobre la adjudicación.
Mientras tanto, la concejala de Turismo Joana Maria Adrover, en calidad de presidenta del consejo de administración de Palau de Congressos S. A, empresa pública integrada por el Govern y Cort para promover la infraestructura, remitió por escrito a la Universitat de les Illes Balears (UIB)Universitat de les Illes Balears (UIB) la solicitud formal para que esta institución se encargue de elaborar un estudio jurídico sobre la legalidad del proceso de adjudicación al Grupo Barceló.
La decisión se adoptó después de que el pasado viernes desde la conselleria de Presidencia del Govern se remitiera por fax un documento a Cort en el que se ponía de manifiesto que los servicios jurídicos de la Comunitat Autònoma no elaborarían el citado informe, que había sido encargado el pasado día 7 de agosto en la sesión constitutiva del consejo de administración de la empresa pública promotora de la infraestructura congresual.
Un portavoz del grupo hotelero manifestó que la compañía se encuentra con "las manos atadas" y con escaso margen de maniobra ante la falta de decisión del Govern y del Ayuntamiento de Palma sobre la legalidad del proceso de adjudicación. Por ello, en estos momentos, y hasta que se produzca una decisión en firme en uno u otro sentido, insistió en que no pueden "hacer nada" más que estar "a la espera".
Pese a lo anterior, manifestó que el grupo hotelero aún se encuentra interesado en hacerse con la explotación del hotel y del Palacio, aunque se han perdido cinco meses "valiosísimos" para la contratación de eventos y congresos desde que el pasado mes de abril la sociedad pública Palau de Congressos S.A. decidió hacer suya la propuesta de la mesa de contratación y, en consecuencia, adjudicar la gestión del hotel y del palacio al Grupo Barceló, cuya propuesta obtuvo mayor puntuación que la presentada por la de Melià Hotels.
No obstante, la adjudicación no se hizo efectiva puesto que debía ser ratificada por la junta de gobierno del Ayuntamiento de Palma, ya que el solar del hotel es de propiedad municipal y, según la oferta presentada, cabe la posibilidad de que el adjudicatario ejerza una opción de compra sobre el establecimiento hotelero dentro de los cinco años siguientes a la adjudicación.
El equipo de gobierno de Mateo Isern, ante la denuncia del grupo municipal Més, entonces en la oposición, de que el informe por el cual se valoraba el precio del hotel en 40,5 millones había "caducado", decidió solicitar nuevos informes al Govern balear. Encargo que nunca se realizó por parte del Ejecutivo autonómico anterior.
Ayuntamiento en funciones
En consecuencia, y pese a que Cort disponía de informes parciales emitidos por sus servicios jurídicos y por la Intervención municipal, Isern no quiso autorizar la adjudicación puesto que su Consistorio ya se encontraba en funciones.
A juicio del portavoz del Grupo Barceló, su "preocupación" por el retraso en la adjudicación de la gestión es extensiva a toda la sociedad, puesto que es una cuestión "perjudicial para nosotros y para Palma". Reconoció que si bien antes de finalizar el pasado mandato realizaron gestiones para la contratación de los primeros congresos una vez finalizadas las obras, "ahora ya no hacemos nada, puesto que desconocemos si vamos a ser nosotros los gestores".
Por otra parte, tampoco se sabe la fecha en que estarán finalizadas las obras, puesto que la constructora Acciona, responsable de la ejecución de las obras, las ha aplazado en varias ocasiones en esta última recta final de los trabajos.
En abril los trabajos debían estar acabados a finales de agosto o principios de septiembre. No obstante, una de las primeras peticiones que hicieron a los nuevos gestores de Palau de Congressos, consistió en hacer uso de los dos meses de prórroga previstos en el contrato, de tal forma que se informó de que los trabajos finalizarían en octubre o noviembre.
La última fecha que se ha dado hasta el momento para dar por concluidas las obras es la del próximo mes de diciembre o enero.
Por lo que respecta a la decisión sobre la gestión del hotel y del palacio, se prevé que, como máximo, se adopte a finales del próximo mes de octubre. Una vez que ayer se realizó la petición oficial a la UIB para que redacte el dictamen de legalidad del proceso, la Universitat asignará el trabajo a un determinado departamento y se dispondrá de 45 días como máximo para emitirlo.
Mientras tanto, la presidenta de Palau de Congressos, la concejala Joana Maria Adrover, junto con el nuevo gerente de la infraestructura, Josep Sintes, están trabajando para que, una vez que las obras estén concluidas, las instalaciones "no permanezcan cerradas ni un día", aunque no se disponga aún de gestor, en el caso de que finalmente se decida no ratificar la adjudicación a Barceló.
