El Ayuntamiento de Palma, a través de la Societat Municipal d'Aparcaments (SMAP), asumirá la gestión de los estacionamientos subterráneos del Comtat del Rosselló y de la Plaza Major, cuando, en 2018 y 2019, respectivamente, acabe la concesión administrativa para su explotación por parte del actual concesionario.
El concejal de Movilidad de Cort y presidente de la SMAP, Joan Ferrer, confirmó este extremo afirmando que, una vez que estos estacionamientos, que están situados en puntos estratégicos del centro de la ciudad, acaben su concesión no se procederá a la convocatoria de un nuevo concurso público para que los siga explotando un particular.
Según Ferrer, ambos estacionamientos serán utilizados por la SMAP y se pondrán a disposición de la política de movilidad de la concejalía. Al respecto, tal como prevé el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) buena parte de las plazas de ambos estacionamientos se podrán destinar a los residentes.
De esta forma, se pretende paliar el déficit de estacionamientos para residentes existentes en el centro histórico de la ciudad, al tiempo que se permitirá que una cantidad de vehículos equivalente a las plazas que se pongan a la venta dejen de ocupar un estacionamiento en superficie.
El estacionamiento del Comtat del Rosselló fue inaugurado en 1973. Es el aparcamiento subterráneo municipal más antiguo y cuenta con 444 plazas distribuidas en tres plantas. En el último mandato de Joan Fageda, coincidiendo con la unificación de tarifas de los estacionamientos subterráneos municipales en concesión, realizó una serie de mejoras en superficie con una inversión de 600.000 euros.
El estacionamiento de la Plaza Major, por su parte, cuenta con 438 plazas distribuidas en dos plantas.
Si bien no se trata de un documento de obligado cumplimiento, en relación al estacionamiento de la Plaza Major, el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) plantea que "la mayoría de las plazas de este aparcamiento se destinen a los residentes cuando expire el período de concesión, lo que permitirá recuperar el espacio público en calzada en distintas partes del Centro Histórico". Dada la saturación actual del estacionamiento del Parc de la Mar y Antoni Maura, antes de adoptar esta decisión habrá que plantear alternativas, como pueden ser la construcción de un nuevo estacionamiento en la zona del puerto, en función de cómo se apruebe el Plan Director del Puerto o la ampliación del Parc de la Mar.
El plan, aprobado este año, ha detectado un déficit de 2.500 plazas de aparcamiento para residentes concentradas mayoritariamente en las barriadas del Eixample. Con datos de 2013, el numero de plazas de los aparcamientos mixtos y de residentes situados en suelo público es de 10.463. Otra de las medidas que contempla el plan consiste en la habilitación de nuevos estacionamientos disuasorios. En la actualidad no se dispone de estos aparcamientos en todos los accesos a la ciudad, lo que no permite dar una alternativa de estacionamiento a los usuarios que entren en coche con destino al centro de la ciudad.
Entre otras localizaciones, para estos nuevos aparcamientos disuasorios se señalan espacios próximos al nuevo acceso del Molinar, así como otros situados en es Coll den Rabassa, en la carretera de Manacor, en las estaciones del metro de Via Asima y de la Universitat. También se podría utilizar el de Son Moix.
