-Cuando se equivoque en una decisión, ¿asaltará su propio despacho?
-[Ríe] Lo importante es la legitimidad política y los valores que hay detrás. No protestábamos por un fallo, sino por defender la justicia social y una educación pública y de calidad.
-¿Y si el que se equivoca es el alcalde?
-En ese caso, tendríamos que plantear ante nuestra asamblea si hay que continuar en el gobierno. Nuestra participación en este pacto no es un cheque en blanco. Si se actúa en contra de lo pactando en el programa, se revisará el acuerdo.
-Me parece que se está convirtiendo usted en un moderado...
-[Ríe de nuevo] No creo que tenga que ver con la moderación. Estoy a disposición de mi asamblea, porque soy representante de sus valores y de su estrategia política.
-Está condenado por sentencia firme tras entrar sin permiso a los despachos de la Conselleria de Educación. ¿Por qué se niega a pagar la multa de 720 euros?
-Fruto de un debate interno de la asamblea de las encausadas de la Conselleria. Esta condena no responde a la realidad, sino a unos intereses políticos concretos. No respeta los derechos y las libertades civiles de protesta. Nuestro acto fue pacífico.
-¿Está diciendo que la Justicia está politizada?
-Evidentemente.
-¿Una entrada a la fuerza no es un acto de violencia?
-Los vídeos están allí. Esas son las pruebas. En mi opinión, no se demuestra que hubiera una entrada a la fuerza. Parte de la sentencia se basa en testigos contradictorios. Al ver la sentencia, no se puede llegar a otra conclusión diferente: la politización de la condena.
-¿Como lleva lo de ser un idealista dentro de una administración pública?
-No sé si me considero idealista. Quizás sí en el sentido de que la utopía es un horizonte hacia el que avanzar. Creo que sí se pueden cambiar las cosas, pero hay que hacerlo colectivamente y tomar conciencia del poder de la sociedad. Las instituciones tienen limitaciones competenciales, económicas y técnicas. Las instituciones no son la salida al cambio social: la parte importante está en la calle, en la organización de la gente.
-Le ha tocado la regiduría de Igualdad y Derechos Cívicos. No entiendo qué significa el concepto "derechos cívicos" en el ámbito del Ayuntamiento.
-Durante el fin de semana del Orgullo Gay Orgullo Gayfue un ejemplo muy claro de su significado. Queremos una ciudad socialmente avanzada y diversa; que la gente acepte la diversidad y las diferencias con naturalidad. Hay que luchar contra la discriminación que han sufrido, por ejemplo, las mujeres o el colectivo LGTBI."Lo importante no es colgar una bandera, combatir la homofobia es una lucha de fondo"
-Se lo pregunto de otra forma. ¿Usted en qué manda?
-Como decía antes, las instituciones tienen limitaciones, pero siguen conservando un valor simbólico importante. Es clave hacer de altavoz de las luchas sociales. Es evidente que hay cosas que no podremos transformar desde aquí, pero sí estar al lado de las luchas que hay en nuestra ciudad, de la gente que se organiza para mejorar la vida de la gente.
-¿Entonces va a ser un área casi sin competencias, solo dedicada a los gestos políticos?
-No, también tendremos competencias. Hay tres áreas importantes. Una es Igualdad, que ahora solo tiene la parte de violencia de género, y habrá que añadir la promoción de una nueva cultura social que no acepte la cultura machista, la del patriarcado. La segunda es Juventud, y la tercera es el área de Familia, Personas Mayores e Inmigración."Hay cosas que no podremos transformar desde aquí, pero sí estar al lado de las luchas de nuestra ciudad"
-Su primer gesto fue colgar la bandera gay en Cort y Flassaders.
-Lo importante no es colgar una bandera, solo es un gesto. Combatir la homofobia es una lucha de fondo. El sábado pasado en Inca el cantante Kevin Coll fue agredido por su orientación sexual. Eso demuestra que tenemos una sociedad que todavía sufre LGTBI-fobia.
-Quieren que Palma sea una ciudad amigable con el colectivo LGTB. ¿Cómo se consigue que no insulten o no le den una paliza a un gay por besar a su pareja en la calle?
-Es una situación equiparable a la igualdad de género. Hace uno años era aceptable en el ámbito privado familiar que un hombre pudiera agredir a su pareja. Ahora no y se condena, aunque todavía hay casos. Si luchamos en este sentido, llegará un momento en que [atacar a una pareja homosexual] no será aceptable. El Ayuntamiento realiza talleres en los que se pueden transmitir valores, debe ser un principio transversal para todas las regidurías. Por ejemplo, que no haya publicidad sexista en los buses de la EMT."Los espacios públicos se han vaciado. Queremos que sean lugares de convivencia y confluencia"
-Proponen recuperar el Consejo Municipal de la Mujer. ¿Qué funciones tendrá?
-Es un órgano de participación para que las mujeres puedan proponer ideas que impliquen a cualquier regiduría. Las mujeres tienen que poder dar su opinión.
-Otro de los acuerdos del programa de gobierno plantea adaptar los espacios urbanos para que se adecuen a las necesidades de ocio de los jóvenes. ¿Significa que habrá bancos para grindar y recintos para botellón?
-Los espacios públicos se han vaciado. Son zonas de paso para ir a trabajar o a casa. Queremos que sean lugares de convivencia y de confluencia. Que sean puntos de encuentro para construir barrio y comunidad. ¿Qué hay que hacer y dónde? Eso hay que hablarlo con la gente en cada barrio. Según las necesidades.
-¿Qué presupuesto va a tener para su regiduría?
-El dinero es limitado. Todavía funcionamos con el presupuesto de 2015, que no lo decidimos nosotros. Lucharemos para aumentarlo el año que viene. No sé decir una cifra exacta.
-¿Son suficientes competencias como para tener que pagar un regidor y un alto cargo a tiempo completo?
-Desgraciadamente sí hay suficiente trabajo, porque la sociedad no ha avanzado en este sentido. Un ejemplo es trabajar en la coordinación interinstitucional con el Govern y el Consell de Mallorca, que nunca ha funcionado.
-¿Qué opina de que ustedes tengan siete altos cargos más que Isern? En el programa electoral de Som Palma prometieron lo contrario.
-Nos hemos encontrado una situación con la que no contábamos. Había áreas totalmente paralizadas. En Bienestar Social o en mi departamento no se hacía gran cosa, solo trabajo burocrático. No se impulsaban proyectos. Lo que habrá que calcular luego es qué recibe la gente del trabajo que haremos.
