El equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Palma todavía no ha decidido cuál será el futuro político de uno de sus regidores, el imputado Guillermo Navarro. El concejal de Seguridad Ciudadana -responsable de la Policía Local y los bomberos- sigue en su cargo, lo que desató por segundo día las críticas de los partidos de la oposición.

Tanto el PSOE como la coalición Més per Palma exigieron ayer al alcalde, Mateo Isern, que cese al regidor imputado. La formación UPYD, sin representación en el consistorio, también se sumó a la petición.

Los socialistas fundamentaron su reclamación en "una cuestión de dignidad política". Su partido exige que Navarro dimita o que Isern le cese. También reclaman a Cort "máxima colaboración con la investigación, policía y juez para aclarar los casos de corrupción".

"La detención de ocho policías y la imputación del regidor de Seguridad Ciudadana y del jefe de Policía son la guinda de una situación que ha ensuciado la imagen de la Policía Local y el buen trabajo de cientos de agentes locales", declaró el portavoz adjunto del PSOE, José Hila.

Hila también puso de relieve "la connivencia política, ya que los escándalos han salpicado a la cúpula policial favorecida por el gobierno del PP".

Los vínculos políticos entre el PP y varios de los policías detenidos también fueron destacados por Més per Palma. El portavoz de la coalición econacionalista, Antoni Verger, afirmó que "algunos de los agentes implicados en las diferentes líneas de investigación son conocidos por su vinculación personal y política con el PP de Palma".

Verger manifestó que el primer teniente de alcalde, Álvaro Gijón, que tiene bajo su jerarquía al concejal Navarro, debe responder sobre los vínculos entre el PP y los policías acusados. "La ciudadanía merece una explicación después de que Navarro haya sido imputado por obstrucción a la Justicia".

El portavoz de Més insistió en que el concejal de Seguridad Ciudadana debe dimitir "si tiene el mínimo de dignidad política". "Los ciudadanos necesitan una reacción urgente y contundente para recuperar la confianza en la policía", concluyó Verger.