El médico de Establiments se ha trasladado. Ya no está en aquel viejo edificio junto a una curva empinada. Ahora ocupa un inmueble más moderno. Desde el pasado 3 de noviembre, comparte espacio con el casal de barrio, situado en la misma carretera de Esporles, pero un poco más cerca de Palma.
Según destacaron ayer los trabajadores de la unidad básica de salud de Establiments, el nuevo local es "más seguro y accesible". En el anterior edificio era imposible aparcar y las personas con muletas o en silla de ruedas tenían serias dificultades para llegar. La unidad básica estaba en una de las muchas curvas cerradas de la carretera vieja de Esporles y en pendiente.
El traslado se ha realizado sin aviso previo a los vecinos. En el anterior inmueble han colgado un letrero para informar de la nueva ubicación. Según los empleados sanitarios, hay "algunos despistados" que todavía no conocen el cambio de emplazamiento.
El nuevo centro todavía no luce los rótulos del IB-Salut, pero tiene actividad desde hace dos semanas. Está en la planta baja del casal de barrio, un edificio que se estrenó en 2008 y que dispone de un aparcamiento para unos diez vehículos. Está adaptado para personas con movilidad reducida. Hasta ahora, el edificio estaba cerrado por las mañanas. Por las tardes se realizaban actividades para los vecinos, como taichi o pilates.
Las salas de la planta baja se han adaptado para sus nuevas tareas médicas. El coste de las reformas asciende a 38.000 euros, que ha asumido íntegramente el Govern balear.
En total, la nueva unidad básica ocupará 110 metros cuadrados repartidos en tres salas: la consulta del médico, la del enfermero y una sala para urgencias.
El ´casal´ seguirá abierto
La actividad del casal continuará en marcha. Se han recolocado los cursillos y talleres vespertinos en las plantas superiores. La biblioteca, que lleva desde 2012 cerrada, seguirá sin actividad.
El traslado del centro médico, que llevaba 26 años en su antigua ubicación, se ha realizado mediante un convenio entre el Ayuntamiento de Palma y la Conselleria de Salud. La cesión de la planta baja tiene una duración prevista de diez años, prorrogables durante otra década más.
El alcalde Mateo Isern destacó que la renovación de la unidad básica de Establiments era "una reivindicación histórica de los vecinos". Isern afirmó que, tras la remodelación, "ha quedado sitio de sobra para las actividades propias del casal de barrio".
El conseller de Salud, Martí Sansaloni, destacó el "salto cualitativo" de las nuevas instalaciones, mediante una "solución imaginativa y creativa" como es adaptar el casal de barrio para la atención médica.
La unidad básica de salud de Establiments se encarga de las 1.700 tarjetas sanitarias que tiene asignadas por zona. Allí trabajan un médico, un enfermero y un auxiliar administrativo entre las 8 y las 15 horas.
Entre enero y octubre de este año, el médico de la unidad básica de salud de Establiments ha atendido a 5.800 pacientes, mientras que el enfermero se ha encargado de despachar 3.400 consultas.
Aparte de los servicios del médico de cabecera, en el centro sanitario también realizan curas, inyecciones, electrocardiogramas o control de enfermedades crónicas, entre otras atenciones.
