Una rotonda alargada de una sola dirección situada debajo de la vía de cintura comunicará las piscinas municipales de Son Hugo con las barriadas de Son Oliva, el Amanecer y la urbanización de Son Ferragut. El Consell de Mallorca prevé que las obras, presupuestadas en 1,4 millones, se puedan iniciar el próximo mes de diciembre.

De esta forma, se pretende dar solución a un problema de movilidad que arrastran las barriadas de Son Oliva y el Amanecer debido a que están cortadas por las vías del tren de Sóller desde hace más de 20 años.

El proyecto ha sido elaborado, tal como explicaron el conseller insular de Urbanismo y Territorio del Consell de Mallorca, Mauricio Rovira, y el teniente de alcalde de Urbanismo de Cort, Jesús Valls, en colaboración con las áreas de Movilidad del Ayuntamiento de Palma, la dirección Balear de Transportes del Govern y la compañía del Ferrocarril de Sóller.

El actual enlace de Son Hugo, situado en el kilómetro 3,8 de la vía de cintura, entre el núcleo urbano de Palma y el polígono de Son Castelló, construido en 1992 coincidiendo con la Universiada, quedó incompleto debido, entre otras circunstancias, a su ubicación sobre las vías del tren de Sóller.

En estos momentos no se pueden realizar el 50 por ciento de los movimientos posibles como entrar y salir de Son Hugo hasta la vía de cintura en dirección Andraix, o desde la barriada de Son Oliva en la misma dirección. Tampoco se puede realizar el cambio de sentido recomendable en todo el enlace de la autovía.

De esta forma, este proyecto, según Rovira, "mejora de forma considerable la intersección con la calle Concordia (o el Camí de Son Hugo) y completa el conjunto de movimientos del enlace haciéndolos compatibles con las infraestructuras existentes".

El proyecto ejecuta un vial en forma de circuito que funcionará como una rotonda, que unirá las dos zonas de la barriada de Son Oliva separadas históricamente por las vías del tren de Sóller. Esta rotonda alargada será de una solo dirección y dispondrá de dos pasos a nivel sobre las vías del tren de Sóller que estarán regulados por semáforos.

Esta configuración permitirá a los vehículos realizar todos los movimientos posibles sin tener que recorrer grandes distancias mejorando la movilidad de la zona. Según Rovira se han estudiado todas las variantes técnicas y la solución adoptada "es la única posible", además de no precisar expropiaciones.