El Mein Schiff 3 hizo escala ayer por primera vez en el puerto de Palma. Este buque, perteneciente a Tui Cruises, ha entrado en servicio hace escasos días y ha sido precisamente en Ciutat donde ha dado por terminado su viaje inaugural.

En la escala de ayer vino desde Cádiz con 2.026 pasajeros, la mayoría de ellos alemanes, y partió por la noche rumbo a Barcelona. Como es habitual en estos casos, se celebró a bordo una celebración en la que la Autoritat Portuària de Balears -representada por su presidente, Alberto Pons- entregó una metopa conmemorativa al capitán del buque Kjeel Holm También estuvieron presentes miembros de Intercruises, la empresa consignataria.

El buque fue nombrado oficialmente en Hamburgo el pasado 12 de junio en una ceremonia espectacular con 1.700 invitados y miles de espectadores. Una cantante alemana actuó como madrina del barco y cumplió con la tradición de estrellar la botella, volando sobre un enorme globo en una espectacular maniobra.

Seguidamente inició su crucero inaugural de nueve días donde ha visitado los puertos de El Havre, A Coruña, Leixoes, Lisboa y Cádiz, siendo Palma el punto final. Desde aquí iniciará un segundo crucero de siete días que le llevará a Malta, su base para este verano, desde donde realizará dos rutas alternativas de siete días: una al mar Adriático y otra al mar Tirreno, la Costa Azul y Córcega.

El Mein Schiff 3 es un buque con unas dimensiones de 293,2 metros de eslora, 35,8 de manga y 99.526 toneladas de registro. Está propulsado por cuatro motores diésel que le imprimen una velocidad máxima 21,7 nudos. Destaca su sistema de tratamiento de gases de escape, especialmente preparado para reducir emisiones.

La capacidad máxima es de 2.506 cruceristas, atendidos por unos 1.000 tripulantes. Ha sido construido en los astilleros STX Finland en la localidad finesa de Turku, donde también se está construyendo un buque gemelo, el Mein Schiff 4, que se espera que entre en servicio en 2015.

El barco dispone de 1.253 camarotes, de los que casi el 90% son exteriores y más del 80% tienen balcón. Dispone también de varios restaurantes y salones. Está dotado, entre otras muchas comodidades, de una zona de spa y varias piscinas. Una de ellas tiene 25 metros de largo y es la más larga instalada en un crucero.

Se espera que el barco regrese a Palma en otoño, cuando venga de paso para ir a las islas Canarias, donde permanecerá toda la temporada invernal.