Vecinos de la calle Mateu Enric Lladó critican la decisión de Cort de reservar temporalmente los aparcamientos de la vía para que los padres de los alumnos de los dos colegios lindantes puedan dejar a sus hijos y, de este modo, no estacionen en el carril-bici. Los residentes afectados se quejan de que cada vez tienen menos plazas en las que aparcar, debido a que el carri-bici ocupa una hilera de la calle desde la pasada legislatura y ahora se ha sumado la decisión de la concejalía de Movilidad, a lo que hay que añadir la eliminación de un centenar de plazas todos los sábados para la instalación del rastrillo de las Avenidas. En total, los denunciantes calculan que con dichas medidas han perdido unas 150 plazas.

El área de Movilidad adoptó la restricción del estacionamiento recientemente "para evitar que los vehículos de los padres de los alumnos de los colegios Escola Graduada y Sant Agustí aparquen en las entradas y salidas ocupando el carril-bici de esta calle", tal como se aprobó recientemente con un decreto de alcaldía.

Con éste "se ha señalizado una reserva de estacionamiento en el lado de aparcamiento de Mateu Enric Lladó desde el número 22 hasta el 30 para que los vehículos puedan realizar el estacionamiento de corta duración -diez minutos máximo- en las entradas y salidas de las escuelas", según la decisión municipal.

Así lo hizo saber el consistorio en una reunión a la que asistieron la asociación vecinal Canamunt, del barrio de sa Gerreria, y los dos colegios afectados, que están de acuerdo con la nueva medida del área de Movilidad.