No sólo la zona rural se vería afectada por el actual trazado del gasoducto a su paso por Palma, ya que también transcurre junto a los dos colegios religiosos del Opus situados en el ParcBit y la escuela pública de Establiments, como denuncian los residentes. Y además de Establiments, hay seis barrios o urbanizaciones de Ciutat afectados por el proyecto del gasoducto que defiende la compañía Endesa: Son Anglada, Son Roca, Son Puig, Son Xigala, Son Rapinya y Génova. A ellos hay que sumar el torrente de sa Riera, ya que la infraestructura cruza su lecho varias veces en tres kilómetros lineales, con los perjuicios medioambientales que conlleva para el importante afluente palmesano.

La conducción subterránea deberá transportar 38.000 metros cúbicos por hora de gas a presión y, en caso de explosión, su onda expansiva abarcaría un radio de unos cien metros, según indican los impulsores de la recogida de firmas contra el actual trazado proyectado.