­Los políticos hablan siempre de la importancia de que la escuela prepare a los alumnos para la vida real y para el mundo que les espera; de la necesidad de formarles para que no sean analfabetos funcionales. Y es en este contexto en el que los profesores de Tecnología reivindican el papel de su asignatura ante la reforma educativa de José Ignacio Wert: "¿Qué sentido tiene hacer menos Tecnología en un momento en el que esta materia tiene más importancia que nunca? No es cuestión de ideología política: Es sentido común".

Eso sostienen Ester Micó y Diana Carretero, presidenta y vicepresidenta respectivamente, de la Associació del Professorat de Tecnologies de les Illes Balears (APTIB), una entidad que se conformó a finales del pasado curso escolar y que ya cuenta con hasta 70 miembros (aunque el número de docentes que se puedan ver afectados por esta reducción horaria supera los 2oo).

Aún no se sabe cuántos horas se perderán de esta asignatura, ya que primero se debe aprobar la ley a nivel nacional para que después las comunidades fijen las distribuciones horarias, pero según calculan podrían estar ante una reducción de casi del 90%. "No desaparece, pero casi", apunta Micó. Además, se introducen cambios que cuestionan desde la asociación, como que la asignatura desaparezca en 2º y en cambio se empiece a impartir en 1º, "cuando los alumnos no tienen los conocimientos matemáticos necesarios". Y lo poquito que quede "no es estrictamente tecnología", dice Micó quien recuerda que esta asignatura incluye las TIC, las tecnologías de la información y la comunicación, que también están en boca de todo político que se precie como sinónimo de futuro y progreso. Y la asignatura es más que eso, apunta Micó: "Buena parte de la materia consiste en enseñarles cómo hacer proyectos, así como las operaciones básicas que luego les servirán para hacer ciclos formativos o ingenierías; se encontrarán con que no tienen la base práctica y la de las ciencias aplciadas". Ahí Carretero ve otra incongruencia: "El anteproyecto de ley también recoge que se apostará por potenciar los ciclos formativos y se cargan precisamente la opción de que tengan la base necesaria para cursarlos", advierte.

"Enfocan la ciencia desde un punto de vista sanitario, y tan importante es destripar una rana, como desmontar un ordenador o un motor", reivindica Micó, "vuelven a un modelo de hace 40 años, es un retraso brutal".

A nivel estatal, la plataforma que agrupa a los docentes de esta asignatura (PEAPT) ha presentado alegaciones y ya ha recabado los apoyos de muchos colegios de ingenieros, que también consideran muy grave reducir la presencia de la Tecnología. A nivel de Balears, la Escola Politécnica de la UIB también les ha mostrado su apoyo, ya que sus profesores ven clarísimo que los alumnos que aterricen en 1º llegarán con un gran déficit de formación, no tendrán el nivel requerido para cursar el primer curso de carrera.

Y la formación en Tecnología no sólo es importante para los que luego van a seguir estudios relacionados, sostienen, "en el mundo actual todos los niños deberían recibir nociones de cultura tecnológica, y tener interés en cómo funciona su frigorífico o saber cómo es posible que un ordenador esté conectado con otro". Recuerdan, en esta época de enseñar "por competencias" y de combatir el anafabetismo funcional, que no hay ninguna asignatura que represente mejor el espíritu de saber aplicar lo aprendido que Tecnología. Esperan que el ministerio de Educación recapacite y rectifique.