Las bicicletas que circulen por las aceras de Palma podrán ser multadas a partir de mañana con multas que oscilan entre los 60 y 300 euros. Estas sanciones también serán de aplicación a los ciclistas que vayan por parques y jardines o por calles peatonales entre las 10.00 y las 20.00 horas. Estas prohibiciones están contempladas en la nueva ordenanza reguladora de la movilidad de los ciclistas que entra en vigor esta semana tras su publicación en el Boletín Oficial de les Illes Balears.

Esta normativa pretende terminar entre otras cuestiones con las situaciones de riesgo que se producen cuando una bicicleta circula a gran velocidad por una acera poniendo en peligro a los peatones. Durante los primeros días de aplicación de la norma la Policía Local informará a los usuarios de las bicis que circulen por lugares no autorizados de que pueden ser sancionados.

Los menores de 12 años acompañados de un adulto son los únicos que pueden circular por las aceras, parques y calles peatonales. Como regla general la ordenanza prohíbe la circulación de bicicletas por las calles peatonales, plazas y parques pero recoge varias excepciones. Está permitido circular por la noche entre las 20.00 y las 10.00 horas del día siguiente y los días festivos, siempre que no se produzcan aglomeraciones, es decir, que la bicicleta pueda mantener un metro de distancia con los peatones.

Otra de las excepciones consiste en que mediante decreto de alcaldía se permitirá circular por espacios como el Parc de la Mar o por algunas calles peatonales como la de Convent de Sant Francesc. A través de un decreto los ciclistas también podrán circular por el día en lugar de por la noche en algunas vías como Fábrica, que es un eje cívico pues está prohibido el acceso de vehículos motorizados.

Sanciones

Circular en bici por las aceras y otras zonas peatonales no permitidas es considerado como falta leve por lo que supone la imposición de una multa de 60 euros. Sobrepasar la velocidad máxima permitida a los ciclistas también es sancionado con esa cantidad. La velocidad máxima en los carriles bici situados en la calzada es de 30 kilómetros por hora y cuando el carril bici está ubicado en la acera se reduce a 15 kilómetros por hora.

Los ciclistas que no respeten la prioridad para los peatones en las zonas señalizadas y circulen en áreas peatonales poniendo en peligro a los viandantes o haciendo maniobras bruscas recibirán una sanción que oscila entre los 61 y 120 euros. Si además el ciclista circula de manera temeraria la sanción puede llegar a los 300 euros.

Las bicicletas tienen prioridad, al igual que los viandantes, en los pasos peatonales frente a los vehículos motorizados aunque con la excepción de que deben atravesarlos por los bordes y circular a poca velocidad.

Con la nueva ordenanza se ha acabado dejar una bici de manera indefinida encadenada a una farola o un banco. Esta norma incluye la posibilidad de que la Policía Local retire un ciclo cuando esté más de 48 horas sujeto a un elemento de mobiliario urbano.

El uso del casco es obligatorio para los menores de 8 años y para los adultos es voluntario aunque se recomienda su uso y el de chalecos reflectantes. El Ayuntamiento creará un registro de ciclos de inscripción voluntaria para facilitar la identificación en caso de robo, pérdida o retirada de la vía pública.

A partir de mañana lunes queda prohibido circular con la bici sobre una sola rueda y hacer maniobras que supongan un riesgo para la conducción y pongan en peligro la integridad física de otros ciclistas, peatones y conductores de vehículos. Los usuarios de bicis tampoco tendrán permitido el uso de cascos, auriculares o teléfonos móviles mientras conducen el ciclo. La norma no autoriza la realización de carreras y competiciones no autorizadas y transportar a otra persona en un ciclo para un solo ciclista.