El ayuntamiento de Palma abona al Consell de Mallorca cinco millones anuales por un servicio que la institución supramunicipal no realiza. Se trata del traslado de los residuos sólidos urbanos a la planta de tratamiento de Tirme en Son Reus, en la que una parte de la basura se incinera y otra sufre distintos procesos de reciclaje.

El Ayuntamiento recauda la tasa de tratamiento de basuras, también denominada de incineración, en la que se incluye el traslado de los residuos sólidos urbanos que, en realidad, realiza Emaya, la empresa municipal que ya cobra a los ciudadanos de Palma por la recogida de basuras.

Según ha podido saber este periódico, del montante total que Cort debe recaudar este año en concepto de incineración, que asciende a 29,3 millones, cinco se corresponden con el transporte de la basura. Este hecho ha sido puesto de manifiesto después de que el Consell de Mallorca haya anunciado a los ayuntamientos su intención de asumir el cobro de la incineración, una cuestión a la que renunció en 1997 y obligó a los municipios a asumir la recaudación de esta tasa.

El anuncio no fue muy bien recibido por ayuntamientos de la Part Forana, en especial por aquellos que han realizado un gran esfuerzo para incrementar la recogida selectiva de basuras y que, aprovechando que ahora recaudan la tasa de incineración, han establecido incentivos para aquellas personas que reciclan más.

Las diferencias en el recibo que los ayuntamientos ponen al cobro por este concepto hasta ahora son posibles puesto que el Consell fija un precio por tonelada recogida en cada municipio y, a partir de esta cantidad, cada ayuntamiento puede aprobar su distribución en los recibos.

De esta forma, por ejemplo, el ayuntamiento de Palma, desde que en 1997 se puso al cobro por primera vez la tasa de incineración, distribuye las cantidades a pagar utilizando el mismo baremo que emplea para el cobro de la recogida de basuras.

De esta forma, teniendo en cuenta el precio de la tonelada de residuos sólidos urbanos fijado por el Consell, el Ayuntamiento ha puesto al cobro este año un total de 187.974 recibos, con los que pretende recaudar 29,3 millones. Dos terceras partes de esta cantidad (20,5 millones) son asumidas por los 168.692 recibos de viviendas, apartamentos y despachos, mientras que las oficinas y locales comerciales asumirán al pago de 4,3 millones repartidos en 17.000 recibos.

Por lo que se refiere al montante de la recaudación, le siguen los hoteles, establecimientos en los que se espera recaudar este año por este concepto 2 millones de euros, repartidos en 248 recibos, justo el doble de lo que abonarán los 573 restaurantes que figuran en el padrón.

En relación al año pasado, el número de recibos puestos al cobro en 2012 supera en 8.643 el censo del ejercicio anterior, lo que supone un incremento del 4,8 por ciento. La recaudación prevista, por el contrario, se incrementa en relación a 2011 un 6,6 por ciento, lo que supone 1,8 millones más que el año pasado.

Incremento del 3 por ciento

El hecho de que el Ayuntamiento haya aprobado para este ejercicio un incremento de la tasa de incineración del 3 por ciento, cuando el Consell de Mallorca no subió el precio que cobra por tonelada recogida, sino que lo disminuyó en algunas décimas, ha sido reiteradamente criticado, sin éxito, por los grupos municipales de la oposición, en especial por el PSOE, quien ha pedido la congelación de esta tasa.

En estos momentos, y hasta el próximo día 30 de abril, los recibos del tratamiento de residuos sólidos urbanos, al igual que los del impuesto de circulación de vehículos, están al cobro en período voluntario.