La biblioteca del casal de barrio de Establiments se cerró hace un mes al tiempo que se clausuraban los talleres y cursos. Estas instalaciones tenían pocos usuarios y el Ayuntamiento de Palma decidió cerrarla al público y planteó como alternativa la biblioteca del Secar de la Real.

Ahora el consistorio ha propuesto a los vecinos del Terreno la clausura o el cambio de la gestión del recinto de lectura y consulta de publicaciones del casal de barrio que también tiene pocos usuarios aunque fuentes municipales niegan la posibilidad del cierre. Las entidades vecinales de ambos barrios han solicitado que estos servicios culturales se ubiquen en puntos más céntricos para aumentar el número de usuario que han disminuido en los últimos años.

Ambos casales se caracterizan por estar en lugares de difícil acceso. En el caso de Establiments estaba ubicado en el casal de barrio, un edificio de nueva construcción en el camí d´en Sarrià. La asociación vecinal quiere que la biblioteca se instale en un local de la plaza de la Iglesia porque así no tendrían que desplazarse al Secar de la Real. En cambio el servicio de préstamos y consulta de libros y publicaciones del Terreno todavía está abierto pero la concejalía de Cultura quiere llegar a un acuerdo con los residentes para que la autogestionen ya que acuden pocos lectores. La entidad vecinal achaca esa baja demanda a que el casal está situado sobre una elevada pendiente y resulta difícil el acceso, principalmente a la gente mayor.

Estas dos infraestructuras de Establiments y el Terreno están incluidas dentro de los once casales que son de propiedad municipal y que han clausurado los talleres y cursos que se realizaban hasta ahora para ceder el uso a entidades y asociaciones.

El Ayuntamiento planteó la posibilidad de cerrar la biblioteca situada en el casal de barrio de Sant Jordi al tiempo que clausuraba definitivamente el casal de barrio que estaba en alquiler. Cort quería encontrar una ubicación más adecuada y al no conseguirlo la mantiene abierta.

El equipo de gobierno de Cort cerrará la mitad de los 32 casales de barrio de Ciutat lo que supone un ahorro de 390.000 euros. De momento ha clausurado seis que estaban en régimen de alquiler.