Una de las asignaturas pendientes del actual mandado consiste en hacer compatibles las dos tarjetas de transporte público emitidas por el ayuntamiento de Palma y el Govern.
La alcaldesa, Aina Calvo, aseguró que "en unos meses" esta compatibilidad será un hecho, después de que se hayan adaptado los sistemas informáticos de lectura y registro de la tarjeta ciudadana (emitida por el Ayuntamiento) y que sirve para viajar en los buses de la EMT, y la intermodal del Govern, que se utiliza en el metro, tren y el transporte interurbano.
La gerente de la EMT, Fuensanta París, manifestó que es incomprensible que ambos sistemas no fueran compatibles desde el principio teniendo en cuenta que tanto la empresa municipal como la del Govern los implantaron de forma casi simultánea. "Nos habríamos ahorrado tiempo y dinero", resaltó París, quien manifestó que sólo la EMT tiene un presupuesto de 200.000 euros para proceder al cambio de sistema. Tanto la alcaldesa como la gerente resaltaron que los usuarios de la tarjeta ciudadana (hay 400.000 emitidas) no tendrán que realizar ningún trámite adicional para poder utilizar este documento para viajar en metro.
