La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) ha presentado hoy alegaciones al Plan de Revalorización Integral (PRI) de la Playa de Palma en las que reclama flexibilidad urbanística para poder realizar mejoras en los establecimientos que mejoren la calidad sin mermar su rentabilidad.

La FEHM, por mediación de uno de sus miembros que es la Asociación de Hoteleros de la Playa de Palma, ha presentado un documento de 50 páginas de alegaciones, con el objetivo de que el proyecto de revalorización suponga "la mejora del bienestar tanto de residentes como de visitantes, mejora de las condiciones laborales de los trabajadores y la mejora de la rentabilidad de las empresas".

Los hoteleros reclaman una nueva definición de las ratio urbanísticas y turísticas que induzca a mejorar la calidad e incrementar de categoría los hoteles sin conllevar pérdida de rentabilidad.

Para hacerlo posible, los hoteleros reclaman que dichas ratio se ajusten al decreto de clasificación hotelera que prepara la Conselleria de Turismo, que se basa en parámetros de calidad de los servicios, que son los criterios de calidad europeos.

La FEHM reclama que se delimiten expresamente las áreas afectadas por el tanteo y retracto y que se excluya a todos los establecimientos turísticos, ya sean hoteles, hoteles apartamentos o apartamentos turísticos, de los efectos que pudiera implicar la declaración de área de rehabilitación integrada (ARI).

Piden que se autorice de forma transitoria a los establecimientos turísticos acometer obras de mejora sin la necesidad de adaptación de los mismos al plan de revalorización integral (PRI) "en aras de facilitar la mejora continua de la calidad en los establecimientos e infraestructuras turísticas de la zona" y que los que ya estén en obras tampoco tengan que adaptarse a dicho plan porque puede cambiar sustancialmente.

Además la FEHM considera necesario que dicho PRI debe adaptarse a los planes generales de ordenación urbana (PGOU) de Palma y Llucmajor.

También reclaman que se extiendan los parámetros de mejora establecidos para los hoteles a los establecimientos comerciales y la oferta lúdica de la zona.

La asociación de la Playa de Palma alega además que debe haber un doble el estudio económico y financiero, uno para actuaciones urbanísticas y otro que defina las que no son de urbanización.

Los hoteleros solicitan que se acrediten los recursos que se destinarán a la expropiación de los establecimientos turísticos afectados "ya sea por cambios de calificación urbanística, estar calificados como de zona verde pública o nuevas alineaciones".

También requieren conocer con detalle los incentivos fiscales que se citan en el Plan y que no están contenidos en la memoria económica.

Otra queja de los hoteleros de la zona hace referencia a la planimetría, de la que piden que se corrijan los errores porque "llevan a situaciones inexplicables".

Los hoteleros denuncian además el plan en su conjunto porque consideran que el proyecto incumple el principio de gobernanza por no haberse coordinado desde la Administración con el sector privado.