Ya es una estampa clásica del centro antiguo de la ciudad: el bar España y su tradicional san Fermín, que adelanta el chupinazo de las fiestas cinco días. La mañana de ayer fue preámbulo en esta bodega ´taurina´, vecina al Banco de España, que coloreó de blanco y rojo la trasera de la plaza Major. Las hurras al santo y a la fiesta, regadas con cerveza y tinto, fueron el eco unánime del bar España. Este san Fermín en miniatura está integrado en el programa de fiestas de verano Postrinitàries que organiza la Asociación de Vecinos de Canamunt Ciutat-Antiga, y que se sucederán a lo largo de la semana hasta el 9 de julio. Entre otros festejos, la celebración del aniversario del bar Flexas con el montaje Somos un circo, además de concursos y otras actividades.