El juzgado de instrucción 11 de Palma ha ordenado el embargo cautelar de la vivienda donde residen Oscar Collado, el ex gerente de la Empresa Funeraria Municipal de Palma, y su esposa Francisca Coll, que ayer declaró en calidad de imputada en el sumario donde se investigan presuntas irregularidades económicas en la gestión de dicha sociedad pública. Ayer Coll prestó declaración, en calidad de imputada, ante el juez Manuel Penalva y el fiscal anticorrupción Pedro Horrach.

Los investigadores del caso Funeraria presumen que Collado pudo invertir parte de sus presuntas ganancias ilícitas en la residencia familiar, un chalé que está a nombre de la esposa del que durante muchas legislaturas fue el factótum de la funeraria de Cort.

Francisca Coll ayer fue interrogada acerca del origen de su patrimonio. La encausada explicó que en los últimos años ha adquirido una serie de inmuebles, partiendo de una primera casa obtenida por una herencia.

Las diferentes viviendas fueron compradas entregando la anterior como parte del pago y suscribiendo una hipoteca por la diferencia. Este sistema habría permitido a la familia Collado comprar su casa, sobre la que pesa una importante hipoteca, según señaló la declarante.

Inversiones en Bolsa

Francisca Coll también tuvo que contestar a algunas preguntas respecto a varias pequeñas inversiones en Bolsa realizadas en los últimos años.

La fiscalía anticorrupción investiga si los pagos mensuales de la casa embargada, que fueron hechos por Collado pudieron encubrir el blanqueo de los fondos públicos presuntamente desviados.

La imputada rechaza esa versión y mantiene que, aunque algunos años se ha dedicado al cuidado de sus hijos, ahora trabaja y la casa la ha comprado con su patrimonio anterior y aportaciones de su salario. Collado se halla en libertad con fianza.