La crisis y la consiguiente merma de ingresos se traducirá el próximo año en una disminución "significativa" de los presupuestos municipales del ayuntamiento de Palma, que ascenderán a 415 millones de euros, un 13,33% menos que este año, informó ayer el teniente de alcalde de Hacienda, Andreu Alcover.

No obstante, esta disminución de ingresos y gastos apenas tendrá repercusión en el nivel de inversiones previstas, aunque no se acudirá al endeudamiento como se hizo en el actual ejercicio, sino que se mantendrán con las aportaciones "externas" procedentes de la ley de capitalidad y la nueva edición de la convocatoria del Fondo Estatal de Inversión Local, conocido como Plan E. En concreto, de los 30 millones que el Govern transfiere cada año al ayuntamiento de Palma en aplicación de la ley de capitalidad, 25,5 se destinarán a inversiones. A esta cantidad hay que añadir 34,5 millones del Plan E –el 20% de los 43 millones que corresponden a Palma se destinarán a gastos corrientes–, por lo que el próximo año el Ayuntamiento dispondrá de 60 millones para inversiones.

"Se trata de una de las cifras de inversión más importantes que el Ayuntamiento ha manejado desde la implantación de la democracia, si exceptuamos el presente año", afirmó Alcover. El teniente de alcalde explicó que el nivel de endeudamiento seá el mismo que el actual, cifrado en 160 millones. El próximo año se prevé amortizar 25 millones de la deuda, aunque para ello se acudirá al endeudamento por la misma cantidad. De esta forma, la deda total será la misma.

En este apartado la actuación municipal ha cambiado en relación a los sucesivos gobiernos del PP. Éstos renegociaron y aplazaron la amortización en varias ocasiones de tal forma que la "deuda histórica" ha permanecido invariable desde prácticamente mediados de los años 90 del siglo pasado.

El aplazamiento del pago pasivo finalizaba este año, por lo que el año pasado el actual equipo de Hacienda optó por solicitar un crédito para pagar las sucesivas amortizaciones y, de esta forma, ir reduciendo el capital adeudado.

Si bien aún no se conocen las cifras concretas del presupuesto municipal del próximo año, Alcover adelantó ayer que la global de ingresos y gastos será de 415 millones, 64 millones menos que losconsignados en el presupuesto actual. Su distribución por departamentos y concejalías también ha sido motivo de "intensas" negociaciones entre los responsables de Hacienda y los de cada una de las concejalías, puesto que "todas van a ver disminuidos sus recursos, excepto las de Bienestar Social, Seguridad y Ocupación", aseguró Alcover. El teniente de alcalde afirmó asimismo que se ha "hecho un gran esfuerzo para mantener los servicios", teniendo en cuenta además que se ha renunciado a la aplicación de los nuevos valores catastrales y se han "congelado" los impuestos, tasas y precios públicos municipales. Para ello, se han tenido que reducir los gastos sin que este recorte afecte, según Alcover, a los servicios que se prestan a los ciudadanos.

Ingresos de construcción

Buena parte de la disminución de ingresos se debe a la menor actividad económica que se traduce en el caso de los ayuntaminentos en una merma de ingresos procedentes de la construcción.

En el caso de Palma, para el próximo año se calcula que se recaudarán "unos 30 millones" en concepto del Impuesto de Construcciones y Obras (ICO), licencias de construcción y plusvalías. La cantidad prevista en 2009 por estos mismos conceptos de 47 millones se convertirá finalmente en "algo más de 20". Se calcula que para 2010 se produzca un "ligero repunte", de ahí que se presupuesten 30 millones.