En menos de un año Palma dispondrá de un mapa de riesgos en el que se señalizarán las zonas de la ciudad cuyos edificios presenten mayores posibilidades de derrumbe.

Este es uno de los compromisos asumidos ayer por todos los portavoces de los grupos municipales que, junto con la concejala de Urbanismo, Yolanda Garví, se reunieron para preparar la creación de la comisión no permanente aprobada en el pleno extraordinario celebrado el pasado jueves, después del desplome del edificio del número 19 de la calle Rodríguez de Arias en el que fallecieron siete personas.

Por otra parte, ayer Urbanismo declaró el estado de ruina del edificio situado en el número 52 de la calle Socors y ordenó a su propietario su demolición. Las ocho familias del inmueble vecino que fueron desalojadas el miércoles de la semana pasada permanecerán por el momento en las pensiones facilitadas por Cort.

Tras la reunión mantenida con los portavoces, Garví explicó que, además del mapa de riesgos, en el próximo pleno municipal se procederá a la constitución de la comisión no permanente, en la que el PP tendrá representación. Como novedad, se constituirá también una subcomisión técnica, integrada por profesionales de la casa y externos, encargada de proponer las "medidas de corrección" que consideren oportunas con el fin de mejorar el mantenimiento y el estado de conservación de los edificios. El portavoz del PP, Julio Martínez, apoyó la iniciativa y aplazó sus propuestas hasta disponer de las conclusiones de los técnicos.