En 1910, Gaspar Bennàssar fue el arquitecto encargado de levantar, en un solar robado a la recién destruida muralla de Ciutat, un edificio que debía albergar el primer colegio público que introduciría en Mallorca el sistema gradual pedagógico (por niveles educativos). Esta apuesta por superar las tradicionales escuelas unitarias fue la Escola Graduada de Llevant, que comenzaría su primer curso 1911/1912 con la intención de ser la pionera de una serie de centros repartidos por distritos que nunca llegaría a completarse, apropiándose para ella de la denominación genérica que incluso transmitió a una de sus calles aledañas.

Tras una reforma integral acometida por el entonces alcalde de la ciudad, Gabriel Alzamora –que pasó por demoler y construir de nuevo todas las instalaciones–, el colegio fue rebautizado con el nombre de este político, en 1973, tras la inauguración del nuevo equipamiento, una denominación que parece nunca cuajó en el inconsciente colectivo de la capital.?"No es que no nos gustara el nombre que tenía. Sencillamente es que nunca dejó de llamarse Escola Graduada. Todo el mundo la llama así", aclaraba su directora, Coloma Ferrer.

El Consell Escolar de este centro llevaba varios cursos solicitando rescatar su primer nombre y el último intento, emitido el pasado 30 de enero, fue escuchado por el Ayuntamiento y posteriormente por la conselleria de Educación que, desde su publicación en el BOIB del 14 de marzo, ha devuelto oficialmente al colegio su denominación popular.

Este centro educativo, en el que están matriculados unos cuatrocientos alumnos de educación infantil y primaria, retorna a su antigua denominación con los preparativos de su centenario (1910-2010), cuya comisión está actualmente recuperando su historia e invitando a los antiguos maestros, alumnos y padres a participar. "Devolverle el nombre es también para valorar su papel en la historia educativa de Mallorca, comentaba su directora.

Las celebraciones estrenarán también nuevas instalaciones, tal como detallaba recientemente a este rotativo el presidente de la Asociación de Madres y Padres (AMIPA), Jaume Ribes. Estas obras, previstas para este verano, supondrán ampliar el comedor, suprimir las barreras arquitectónicas y el cableado para permitir la conexión a Internet, de la que actualmente carecen. Pero los dos rótulos con el nombre de CP Gabriel Alzamora de sus dos puertas (en las calles Mateu Enric Lladò y Escola Graduada) permanecerán todavía durante todo este curso. Tal como explicaba su directora, será tras la reforma cuando se cambiará la cartelería, por si los trabajos pudieran dañar a las recién estrenadas.

Los aspirantes a bombero de Palma comienzan hoy las pruebas físicas. Los 400 candidatos que han superado el primer ejercicio de conocimiento de catalán tendrán que enfrentarse a una carrera de fondo de 3.000 metros en el Estadi de Son Moix y mañana a otra de natación de 100 metros en las piscinas de Son Hugo. Los que queden continuarán con el proceso.