Los médicos forenses Antoni Siquier y Emilia Salas ya han entregado a la jueza el informe facultativo sobre el estado de salud del ex concejal del área de Urbanismo de Palma, Javier Rodrigo de Santos, en prisión desde hace casi dos semanas. Los médicos confirman que De Santos sufre una adicción a la cocaína. Es decir, es consumidor habitual de sustancias estupefacientes, tal como él mismo había manifestado desde que estallara el escándalo por el que se descubrió que había gastado dinero público en servicios sexuales de ambientes homosexuales. Los médicos, según pudo saber este periódico, creen que si bien es cierto que esta adicción existe, no aprecian que el acusado tenga sus condiciones volitivas muy alteradas. Es decir, podía controlar su voluntad. Por tanto, la condición de cocainómano de De Santos sólo le permitiría en estos momentos acogerse a una mínima atenuante, no eximente como incluso se había planteado, siempre y cuando el tribunal o el jurado que le juzgue entienda que existe una relación directa entre su condición de cocainómano y los gastos que realizó con la tarjeta de crédito para abonar los servicios sexuales de Casa Alfredo.

Fuentes jurídicas señalaron que la fiscalía no va a dar su brazo a torcer y no está dispuesta a aceptar que el consumo de cocaína sea razón suficiente para justificar, a efectos de atenuante, la actuación del ex regidor de Urbanismo de Palma. Además, los fiscales creen que en todo caso podría entenderse que De Santos no podía controlar su voluntad por su condición de cocainómano si hubiera pagado droga con la tarjeta de crédito, pero lo que hizo fue abonar las facturas de sus incursiones nocturnas en el local de alterne para mantener relaciones sexuales con adolescentes.

El informe que todavía no se ha entregado en el juzgado es el del perito psicológico del juzgado, que está pendiente de plasmar por escrito las conclusiones que obtuvo tras las entrevistas personales que mantuvo con el ex político conservador.

Rodrigo de Santos no está en prisión por los gastos que realizó con la tarjeta de crédito municipal, sino por un delito de abuso sexual cometido supuestamente sobre dos menores. Las dos víctimas, que son hermanos, prestaron declaración el pasado lunes ante el juez que lleva el caso. Una prueba adelantada en la que estuvo presente la fiscalía y el abogado defensor. Los menores confirmaron todas y cada una de las acusaciones que manifestaron ante la Policía, es decir, ratificaron que Rodrigo de Santos había abusado sexualmente de los dos. El juez puso todos los medios para asegurar el anonimato de las dos víctimas y para que esta declaración sea utilizada como prueba en el juicio. Se intentará que los dos menores no tengan que acudir a declarar ante el tribunal, ya que lo habrán hecho con anterioridad en esta prueba anticipada.

Cambio de abogado

Quien definitivamente ha abandonado la defensa de Javier Rodrigo de Santos ha sido el abogado Bartomeu Vidal, que asumió su representación desde el mismo momento en que el ex regidor fue citado a declarar ante la fiscalía. Vidal ya mostró su incomodidad en defenderle en la causa por abuso sexual a los menores, ya que él mismo fue el primer sorprendido sobre este grave tema. Vidal, sin embargo, se mostró dispuesto a seguir defendiéndole por el tema de los gastos con la tarjeta de crédito y en la causa que instruye la fiscalía por presuntas irregularidades en la compra del castillo que se instaló en el parque de sa Riera, caso que todavía no ha sido denunciado en el juzgado.

Sin embargo, De Santos ha decidido definitivamente prescindir de sus servicios y ha considerado que su letrado debe defenderle en todas las causas. Por ello, ha encomendado la defensa al abogado José Ignacio Herrero, experto en derecho penal, que ya mantuvo su primer contacto con su cliente en el centro penitenciario de Palma. Lógicamente el letrado todavía no ha tenido la oportunidad de leer en profundidad toda la documentación de las dos causas judiciales que se están tramitando. El caso de los abusos sexuales sigue secreto.