Autoritat Portuària acabó hace poco de remozar los 320 metros lineales de bancos de cemento que adornan el paseo del Moll Vell.

Sin embargo, lamentablemente, detrás de éstos no deja de acumularse basura que ofrece una mala imagen ante los turistas.

Así, es común ver entre los bancos y las rocas no sólo basura, sino también residuos voluminosos, que probablemente proceden de la práctica del ´botellón´.