Alguien en Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha (FEVE) tuvo una brillante idea: instalar un telesilla entre Son Armadans y el castillo de Bellver. Este medio de transporte se utiliza sobre todo en estaciones de esquí y no es frecuente encontrar nieve en las inmediaciones del suave monte palmesano. Ante esta adversidad, los cerebros de la empresa estatal no se vinieron abajo y propusieron construir una gran terraza, un restaurante y una sala de fiestas en las inmediaciones -a menos de 20 metros de la entrada- de la histórica defensa impulsada por Jaume II.

El proyecto, presentado en marzo de 1957, preveía ubicar la estación de salida en la esquina de las calles Andrea Doria y Son Armadans. Desde allí hasta la entrada del castillo el tendido tendría una longitud de 880 metros con un desnivel de 61. Debía sostenerse sobre doce torres metálicas de entre 6 y 12 metros con focos que iluminarían el trayecto. La duración del viaje sería de nueve minutos y 46 segundos. La capacidad de transporte era de 450 viajeros cada hora y el coste del billete oscilaría entre las 10 y las 12 pesetas.

Los promotores de la idea aseguraban que el telesilla "colocaría a Balears por delante de los lugares más favorecidos por el turismo en el Mediterráneo".

Pese a las supuestas bondades que vendía FEVE, el telesilla de Bellver contó con una férrea oposición ciudadana e institucional. Diario de Mallorca publicó un editorial con el contundente titular: "No debe prosperar". Un grupo de Amigos de la Ciudad se movilizó en pleno franquismo para expresar su rechazo y su apoyo a las autoridades. La Cámara de la Propiedad presentó un escrito de repulsa en el que argumentaba que la obra era "de un caracterizado snobismo y modernidad que ningún aliciente añadiría a los que la pródiga naturaleza ha derramado a manos llenas". El ingeniero Antonio Parietti firmó un informe para la Diputación en el que afirmaba que este sistema de transporte "no parece el más indicado". El Ayuntamiento en pleno se opuso al telesilla porque la "opinión pública se había mostrado unánime y contundentemente contraria". FEVE tuvo que renunciar a su telesilla.

¿Sería mejor Palma si se hubiese construido el telesilla de Bellver? Nooo, sería un desastre aún mayor que el cerco al que está siendo sometido el bosque.