El cuento La Intrusa de Jorge Luis Borges, uno de los grandes de la literatura universal, constituye una muestra extrema y dramática del trato de la mujer como objeto.

En la narración Borges, pese a haber sido un hombre romántico y humanista, describe la parábola de cómo el enamoramiento de dos hermanos de una misma mujer desata un conflicto que va acumulando tensión hasta que lo resuelve uno de ellos matándola para quitar la causa de des-unión fraternal.

En la historia la protagonista no tiene ninguna otra dimensión que ser objeto del deseo de los hermanos.

Estos días, la granadina Juana Rivas, se ha transformado en la heroína que lucha por conservar la tenencia de sus dos hijos en una sonada batalla legal con su ex marido el italiano Francesco Arcuri.

El conflicto que tiene fuerte repercusión mediática ha incluido enfrentamientos con el sistema jurídico que le exigió la entrega de los niños, acusaciones de malos tratos y violencia de género, secuestro, consecuencias penales y un complicadísimo panorama legal, familiar, ético y psicológico.

Un verdadero rompecabezas para el juez de instrucción por la colisión entre los protocolos legales y la consideración a la salud psíquica de los niños.

La argumentación de la granadina se basa en la existencia de años de malos tratos de los que habrían sido testigos los disputados hijos.

No es nada fácil para el juez resolver sobre lo verdadero, lo justo y lo conveniente para los niños.

Pero aún dejando en suspenso el desenlace de este caso, lo cierto es que, tal como lo ha demostrado el fuerte apoyo social a la protagonista, el tema de la violencia que suele aflorar en las relaciones próximas tiene, en este caso, fuerte vigencia.

Independientemente de la forma en que se materialice la violencia siempre se trata de la negación de la subjetividad del otro.

Los dos géneros suelen incurrir en esas actitudes, aunque es innegable que existe una asimetría desfavorable para el femenino.

Mestressa es el término con el que en la familia tradicional mallorquina, considerada matriarcal, se representa el poder de una mujer, sin embargo el primer rasgo de virtuosismo que se le atribuye en las descripciones costumbristas es la abnegación. Que significa literalmente negarse a si misma!

Por el contrario, el primer antecedente de la batalla legal de este caso es una denuncia por la agresión física que Juana Rivas sufrió a manos de su esposo al negarse a un interrogatorio .

Una hipótesis razonable es que Rivas constituya un típico caso de mujer maltratada inconscientemente cómplice de su agresor, ya que hubo varios intentos de "darse otra oportunidad".

Aunque las confrontaciones entre feminismo y machismo tengan interpretaciones diversas, probablemente el argumento más sólido de las reivindicaciones feministas es la lucha de la mujer por ser sujeto y no objeto.

Uno de los riesgos más dramáticos en toda la telaraña de actuaciones judiciales de este caso es que Juana Rivas acabe en prisión, sin sus hijos y quede eliminada de la escena, como la intrusa de Borges.

*Psicólogo