Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Deriva húngara

El ´brexit´ ha acentuado el sentimiento europeísta y la magnanimidad democrática de la instituciones centrales de la UE, decididas a que el Reino Unido no saque ventaja de su ruptura unilateral a costa de los restante socios de la UE, y dispuestas a fortalecer la idea unitaria de Europa ahora que se ha ido el socio disidente que más hizo para que no progresara la unión política basada en el mercado común.

Y así, Bruselas ha reaccionado con insólita dureza ante la Hungría de Víltor Orban, que ha tenido el desparpajo de escribir una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, pidiéndole "por solidaridad" la mitad de lo que ha costado el elevado e inexpugnable muro que construyó en su frontera con Serbia para impedir el paso de inmigrantes durante la crisis de 2015. La respuesta ha estado cargada de ironía: "tomamos nota de que el Gobierno húngaro reconoce que la solidaridad es un elemento importante en la UE", en clara referencia la insolidaridad mostrada por Hungría al rechazar repartir con los restantes socios comunitarios la carga de seres humanos en estado de grave necesidad que llegaba de fuera. "La solidaridad no funciona a la carta -ha dicho Bruselas en su respuesta—, tomando un plato como la gestión de fronteras y rechazando otro como las decisiones de reubicación que adoptó el consejo europeo".

Hungría ya ve que no se le va a consentir su deriva autoritaria: o rectifica, o puede ir haciendo las maletas.

Compartir el artículo

stats