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Ritos de paso

Las chaladuras

Hay playas de los locos, para los locos. "Esa playa está llena de locos" le decía su madre al poeta canario Arturo Maccanti cuando regresaba de sus andanzas por la playa de Las Canteras de Las Palmas de Gran Canaria. Incluso existe una playa muy surfera, en Cantabria, que se llama así, "la playa de los locos."

Revilla no existía cuando le pusieron ese nombre. Pero ese nombre me impresionó la primera vez que lo oí, paseando por Suances con mis tíos Ana y Juanjo, muy niño todavía como para saber lo que significaba "loco" pero con la lucidez suficiente como para sentir escalofrío. "Es que Pedro Sánchez, el líder del PSOE, es como un actor plano, irrelevante, de esos que pasan desapercibidos, de esos que da igual que estén en la obra, en la película, como Andoni Ferreño" nos lo decía un actor muy actor y muy conocido, a un letrado y a mí. Comíamos en un japonés para aprendices, -todo muy rico- y el actor reclamó el anonimato. "¡Cómo no" le dije casi ofendido. "Ten cuidado con este, que te saca en los papeles" sentenció el letrado.

Los tres reímos porque acabábamos de darnos cuenta de que igual que en Moncloa y en Génova está don Tancredo, en Ferraz, solo en Ferraz, está Andoni Ferreño. Qué chaladura. Qué locura. En la sede de Podemos, dije, "está claro que está Charles Manson y sus sonrientes chicas asesinas. Irene Montero es clavadita a una de las que apuñalaron a Sharon Tate," sentencié. "¿Pero cómo puedes acordarte de eso, si solo teníamos once años o menos?" me espetaron. "Es que mi padre, como sabéis, era criminólogo, y mostró mucho interés por el caso, más bien por la psicopatología de los asesinos.

Creía que en su fisionomía había rasgos que podían explicar la barbaridad que perpetraron." Ambos, letrado y actor, me observaron en silencio, pero sin asentir, y pasamos a otro tema. "Y Villacís, ¿qué me decís de Villacís?", nos preguntó el letrado. "Para mí es la sonrisa del régimen, como Solís Ruiz". De nuevo silencio. y carcajadas. "A ver si consigues no remontarte más allá de treinta años, por favor", dijo el actor. Por eso nos fuimos a las papelerías y librerías de nuestra infancia, y nos salieron todas, pero esas quedan para otro día porque empezamos a recordar a sus dependientas y dependientes, y a sus delantales, y, sobre todo, sus olores: papel, goma arábiga, goma de borrar, lápices, acuarelas, más papel, de libros y de libretas. En fin, las chaladuras.

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