El ministro de Justicia en la última semana del mes de noviembre, ha reconocido que la Justicia lenta no es Justicia, por lo que hay que recortar los plazos de la Ley de Enjuiciamiento Criminal de forma que la fase de investigación se otorgue a los fiscales, mientras que los jueces se ocupen de la fase definitiva hasta la Sentencia.

A mí me ha parecido que no sabe de que habla.

Si la fase investigadora o de instrucción se acorta, no se podrián obtener los medios de prueba necesarios para la resolución con lo que obtendrán la absolución multitud de delincuentes que han realizado actividades delictivas. Es como si dijéramos: absolución frente a un delito y no hay delincuentes. Lo siento por el ministro de Justicia, que debería dimitir ante su proposición.

Era el año 1999 cuando la Abogacía llevó a cabo un Congreso en Sevilla, yo que era decano del Colegio de Baleares, desarrollé una ponencia. La relación de partidos políticos hizo que todos llegaran a un Pacto de Estado para la Justicia. Al cabo de dos meses se desdijeron, pues no había medios económicos para llevarlo a cabo. Hoy existen más de 350.000 casos penales pendientes de resolución, por lo que parece inaudita la afirmación del ministro de justicia: reducir el tiempo de investigación para que sean resueltos por los jueces, que se verán obligados a absolver a multitud de delincuentes. Aun en estos casos dudo que se puedan dictar tal número de sentencias.

En alguno de mis artículos he afirmado que la plantilla de jueces actuales se debe multiplicar, como poco, por tres.

Es preciso un Pacto de Estado para la Justicia, en el que se examinen los problemas de la misma y se acuerde obtener el dinero necesario para atender a la hermana pobre del Estado. Para ello, naturalmente, será necesaria una subida de impuestos de forma que quien más tenga más pague, aunque, una vez cumplido el objetivo, se elimine dicha subida.

No hay que archivar los procesos dejando inacabada la fase investigadora de forma que se paseen libremente multitud de delincuentes.

* Abogado, Exdecano del ICAIB