¿Les gusta Gesa? ¿Les hace ilusión que sea municipal? ¿De la gente? Hila y Noguera nos prometen a todos los ciudadanos que Gesa va a ser nuestro, que se va a rehabilitar, que va a ser un espacio creativo?

Por cierto, ¿saben ustedes qué es eso?, ¿qué significa 14.000m2 de espacio creativo?, ¿hay algún estudio serio que avale la viabilidad de este proyecto?, ¿o los palmesanos pagaremos las ocurrencias variopintas de los gobernantes y aquí no pasa nada?

Lo cierto es que mientras el edificio lleva 8 años degradándose inexorablemente debido a su abandono, el alcalde Hila y el alcaldable Noguera ocupan titulares con anuncios grandilocuentes al respecto y a los ciudadanos nos venden la información que a ellos les interesa, ocultándonos la que no quieren que trascienda.

En ninguna rueda de prensa han explicado que Endesa, antigua propietaria de Gesa, a día de hoy está en negociaciones con el actual y el próximo alcalde, porque la empresa se considera agraviada con la fachada marítima llevada a cabo por el equipo de gobierno del Sr. Hila hace dos legislaturas.

Por aquel entonces el Pacte, con el Sr. Hila como teniente de alcalde, defendió que la Fachada Marítima tenía que ser "para la gente", quería "liberarla de la especulación" de los edificios que se iban a construir en primera línea y transformarla en un gran parque. Todo muy populista y de fácil venta a la opinión pública. ¿Quién no va a querer un parque? Una excelente ocasión para que el Pacte apareciera como el salvapatrias de los palmesanos.

Pero claro, las cosas no siempre son tan sencillas, suele haber letra pequeña. En este caso, los terrenos para el mencionado parque no eran municipales, tenían propietarios. A éstos el Ayuntamiento les obligó a aceptar cambiar sus terrenos en primera línea de mar por otros en segunda y tercera línea. Para que nos entendamos, algo así como que le cambien solomillo por mortadela. ¿Usted qué diría? Yo, que no. Y eso ha dicho Endesa, propietaria de los mismos, quiere renegociar las condiciones que en su momento impuso el equipo de gobierno al que perteneció Hila.

Ya entonces desde el Partido Popular advertimos que faltaba una valoración económica realista que cuantificase las posibles indemnizaciones económicas que pudieran derivarse, ya que el mayor afectado por la modificación se había negado públicamente y de manera rotunda a aceptar los solares que el Ayuntamiento le asignaba a cambio de los suyos en primera línea.

Ahora, ocho años más tarde, se confirma que teníamos razón. La verdad es tozuda y tarde o temprano acaba estampándose contra los que la manipulan torticeramente. Nos vendieron un magnífico parque poco menos que gratuito, una gran zona de verde de todos y todas para todos y todas. Así, en este lenguaje tan de izquierdas. Con una gestión también muy de izquierdas, pisando derechos, gastando sin previsión de futuro y presuponiendo responsabilidad cero.

Al final ni el parque es tan magnífico, ni es tan verde tiene más cemento que árboles ni hay valiente que pueda estar allí al sol sin sufrir una lipotimia de abril a septiembre. Pero puede ser mucho peor, porque el actual alcalde y el acaldable plantean modificar de nuevo la zona para la construcción de pisos, en concreto dos edificios de 14.000m2 de edificabilidad y cuatro plantas de altura.

Así que ya saben, donde dije digo, digo diego, y si antes el dúo Hila y Noguera defendían encendidamente que la Fachada Marítima tenía que ser pública, que había que liberarla de la especulación y de las viviendas para ricos, ahora no tienen ningún problema para plantear todo lo contrario. Sin pudor y sin rubor.

¿Principios? ¿Ideología? ¿Coherencia? Este gobierno es el más alto representante de la máxima de Groucho Marx: Estos son mis principios, pero si no les gustan tengo otros. Con la diferencia de que en este caso la motivación es mantener la preciada silla, al fin y al cabo uno no es alcalde todos los días, ni está a punto de serlo a menudo, así que deben considerar que vale la pena hacer lo contrario de lo que defendían hace ocho años.

¿Y los ciudadanos? Nosotros a callar, que los señores del pacte saben mejor que nos conviene a cada momento. Sólo cuando gobierna la derecha hay que salir a exigir y a reclamar. Ahora el Pacte nos exige bajar la cabeza, porque sus integrantes creen gozar de una superioridad que les hace infalibles y sordos a las críticas de los palmesanos y de la oposición.

Desde el Partido Popular reclamamos transparencia y participación de la ciudadanía. Lo que el Pacte predicaba en campaña, ahora tiene la oportunidad de oro de hacerlo realidad.

¿Queremos los ciudadanos un edificio como Gesa, mantenido con fondos públicos? Es más, ¿lo necesitamos?, ¿aceptamos las viviendas de lujo antes proscritas?

¿Y por qué no? También exigimos una disculpa a los ciudadanos por prometer lo que no era posible, a pesar de las advertencias del Partido Popular y de los propios funcionarios, y sobre todo, por negociar a espaldas de la gente. Realmente este no es el Govern de la Gent.

*Portavoz de Turismo del Grupo Parlamentario Popular