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Llorenç Riera

El inconcreto idioma de la buena voluntad

Es muy probable que el remedio que se aplica sea claramente insuficiente para aplacar la enfermedad y, en el mejor de los supuestos, acabe estabilizandola como crónica. Muerto el TIL, algo había que hacer, porque todos se habían mostrado partidarios de la enseñanza en lenguas extranjeras en la formación reglada básica y, por otro lado, en un mundo global y en una sociedad particular, como la balear, abocada al turismo, el conocimiento de idiomas resulta consecuente y vital.

Siempre se ha dicho que el problema no radicaba en el concepto, sino en el instrumental. La herramienta con patente del PP y sello del expresident Bauzá, fue rechazada en masa por excesiva y por fabricación rápida sin garantía de calidad ni de aplicación práctica. Fue invalidada por los docentes, la sociedad y los tribunales.

Tras un periodo transitorio, aprovechado para incidir en la pacificación de las aulas y sobre todo de los claustros de profesores, ahora se pasa de la imposición a la manga ancha. Es el destino de esta tierra castigada y desconcertada a base de movimientos pendulares en las materias sustanciales que afectan a su gobierno.

El Govern Armengol presenta su decreto de lenguas extranjeras. Gustará a los docentes porque, con él en la mano, cada uno podrá hacer lo que considere oportuno o tenga capacidad de realizar. No está tan claro, en consecuencia, que los escolares tengan garantizado en la práctica el aprendizaje de idiomas foráneos. Todo queda confiado a la buena voluntad y a la disponibilidad de los centros, lo cual equivale al uso de un idioma inconcreto, sin léxico de expresión definida.

Parece que el Govern se ha preocupado más de neutralizar nuevos conflictos potenciales que de especificar y asegurar cómo, cuándo y porqué resulta aconsejable impartir enseñanzas de materias no lingüísticas en lenguas extranjeras. Es la misma actitud que lleva a la presidenta Armengol a ampararse en el "respeto y consenso" y no tanto en los detalles concretos y puntuales. Que cada uno vaya haciendo lo que buenamente pueda y nosotros procuraremos facilitar los medios para que los profesores se pongan al día y refuercen conocimientos para explicarse en lenguas no nativas, ha venido a decir la presidenta. Era "una prioridad política" que pretende introducir "seguridad jurídica".

A falta del necesario pronunciamiento del Consell Escolar, el PP ya le ha espetado que la medida adoptada "ni regula ni decreta nada" y Ciudadanos le reclama que se introduzca igualdad en todos los institutos. De momento, sabemos que cada colegio decidirá de acuerdo con el claustro de profesores y sus órganos de gobierno y decisión. También que la enseñanza en lengua extranjera podrá hacerse, total o parcial, en una área de infantil, una asignatura de primaria, secundaria y un módulo de Formación Profesional, sin que para ello sea necesario disponer de autorización previa. Son posibilidades no aseguradas.

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