Este es el eslógan de la campaña que la APTIB ha promovido desde el 2012, en defensa de los estudios técnicos y la cultura tecnológica. Los tecnólogos no han tenido pausa desde que se publicó el primer borrador de la última ley educativa (LOMCE). Desde Balears hasta Bruselas, pasando por Madrid, para potenciar el trabajo en equipo y la resolución de problemas en contextos reales, imprescindibles para consolidar la alfabetización tecnológica de la ciudadanía del siglo XXI. La punta de lanza la encabezan los docentes de tecnología pero el triángulo se sujeta por otros dos pilares básicos; por un lado muestran su gran preocupación las universidades politécnicas entre las que se encuentra la Escuela Politécnica Superior de Balears y el otro pilar básico es el sector industrial a través de los colegios profesionales de las ingenierías, entre ellos el destacado COEIB (Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Balears). Precisamente haciendo hincapié en el mundo laboral, hay gran demanda de perfiles técnicos y tecnológicos por lo que la APTIB recuerda una vez más en las últimas enmiendas presentadas a la Conselleria d'Educació i Universitat de Balears a principios de mes, que es importante trabajar el área desde edades tempranas, y es a través de la tecnología en Secundaria cuando nuestros jóvenes pueden dar sus primeros pasos en la proyección y la innovación, además de las nuevas tecnologías tan en boga últimamente.

La tecnología en la educación, lamentablemente es una gran desconocida, pero permite desarrollar las habilidades necesarias para afrontar los retos de una sociedad cambiante (interpretar una factura eléctrica, un plano, o quizás interesarse por la programación de automatismos). Quizá con otra nomenclatura como Iniciación a la Ingeniería, nuestros políticos le prestarían más atención pues no se trata únicamente de nuevas tecnologías, también contempla las tecnologías históricas como las máquinas simples en su totalidad. Desde la APTIB nos preocupa que aspectos curriculares como la robótica, la automática, la domótica o la electrónica que se trabajan con exclusividad en esta área, dejen de formar parte en la formación integral de nuestro alumnado, y el riesgo es mayor cuando la vocación de nuestros jóvenes es la ingeniería. El sistema educativo de las Islas ¿se puede permitir perder el tren de la innovación? La APTIB piensa que Balears debe subirse a este tren, es un derecho y una obligación.

(*) Presidenta de la Associació de professors de tecnologia de Balears (APTIB)