Fue el anterior responsable en la conselleria de Hacienda y Economía del Govern balear, Josep Ignasi Aguiló, quien, en una intervención parlamentaria, pronunció la expresión, que tuvo su repercusión mediática, de que nuestra comunidad autónoma caminaba "del caos al cosmos". Fue muy certero en su afirmación. La comunidad autónoma de Balears, en 2011, cuando finalizó la aciaga legislatura del segundo Pacte de Progrés, estaba hundida en la bancarrota. Las entidades bancarias habían cerrado el grifo de la financiación y el Govern dejó de pagar a sus proveedores. De hecho, éstos cobraban (los que podían) a 752 días de media, es decir, ¡a más de dos años! Todo un disparate que condenó a muchas empresas al cierre y a muchas personas a quedar sin trabajo.

El déficit se había disparado a cifras inasumibles y en progresión creciente. Se consolidó un déficit estructural de más de 1.100 millones de euros anuales. Es decir, se gastaban 1.100 millones de euros más de los que se ingresaban. Un despropósito que forzó el incremento descomunal de la deuda pública, que pasó en cuatro años de los 1.700 millones de 2007 a los 5.250 millones de 2011. Si a esta deuda bancaria se le suman los 1.600 millones de facturas que dejaron impagadas a proveedores, que también es deuda, el resultado es que todos los ciudadanos de Balears en 2011 debíamos unos 6.850 millones de euros. Se cuadruplicó la deuda de la comunidad en apenas cuatro años.

Y mientras la hacienda pública degeneraba en el caos más absoluto, cada día perdían su empleo 69 personas. Más de 46.000 personas, según el SOIB (según la EPA, 97.000) perdieron su empleo durante esos larguísimos años de gobiernos del Pacte de Progrés. De hecho, de 2007 a 2011, el índice de pobreza aumentó un 288% según un informe de Funcas. Balears pasó de ser la comunidad con un menor índice de pobreza, a ser la quinta. Los colectivos del tercer sector, aquellos que dedican todos sus esfuerzos a las personas más necesitadas, dejaron de cobrar las subvenciones y los convenios. Y mientras tanto, los presupuestos de la conselleria de Acción Social se reducían en un 5%, en un ejemplo más de despreocupación y pasividad del Govern del Pacte con quienes peor lo estaban pasando y con quienes con más dureza se había ensañado la crisis.

Cuatro años después, en 2015, la situación es diametralmente diferente. El camino hacia el cosmos está dando sus resultados. Las recetas aplicadas por el Govern de José Ramón Bauzá están dando sus frutos. Hoy nuestra comunidad es creíble y confiable. Hoy Balears se puede financiar con total normalidad. Los proveedores están cobrando a una media de 36 días. En cuatro años han pasado de cobrar a 752 días a hacerlo a 36. Además, a través de tres sucesivos mecanismos extraordinarios de pago a proveedores se han podido saldar los 1.600 millones de impagos que dejó el Pacte de Progrés.

Hemos reconducido el déficit, mediante un riguroso control de los gastos y con una serie de medidas de racionalización de los recursos. De hecho, en el año 2015 cerraremos con un déficit público de apenas 195 millones de euros, muy lejos de los más de 1.100 millones con que se cerraban los ejercicios económicos los años del Pacte de Progrés.

Entre las medidas aplicadas cabe destacar la creación de una central de contratación que ha conseguido un ahorro de 2,98 millones de euros, o la reducción de alquileres y reubicación de servicios con un ahorro de 2,35 millones. Se han eliminado 110 empresas públicas, pasando de 181 a 71, con un ahorro de más de 350 millones de euros. Los gastos de representación han pasado de 4,7 a 1,1 millones. También se ha reducido el número de altos cargos que han pasado de los 100 de la anterior legislatura a los 61 actuales y las direcciones generales han pasado de 66 a 36, con un ahorro total de 4,11 millones.

El redimensionamiento de la administración pública, contrariamente a lo que vaticinaba la izquierda, ha servido de palanca para levantar una economía que estaba en una profunda depresión. Balears ha pasado de un crecimiento negativo de -3,9% en 2009 a una previsión de crecimiento, según el BBVA, del 2,8% del PIB en 2015, además de llevar 28 meses consecutivos reduciendo las cifras de paro y 22 meses creando ocupación neta. De hecho, según la EPA, hay 40.000 personas más trabajando hoy en comparación a los datos de 2011.

Las políticas puestas en marcha por el Partido Popular han revertido una situación caótica y han colocado a nuestra economía en la senda de la recuperación y de la reactivación económica. Es importante seguir haciendo reformas, seguir ahondando en el camino ya iniciado. Nuestra sociedad no se merece volver al caos al que nos quiere devolver la izquierda.