El Colegio Oficial de psicólogos de las Balears retoma, una vez solventadas las discrepancias motivadas por la impugnación de una candidatura por no reunir todos los requisitos establecidos en los estatutos, el proceso electoral para la junta de gobierno.
Una convocatoria electoral, las elecciones en definitiva, es una ocasión para que todos/as los/as colegiados/as puedan pronunciarse y den su apoyo a los miembros del equipo de una Junta que crean que deba defender los intereses de la profesión y del colectivo. Un equipo –y a la historia del Colegio me remito– que, para afrontar todos los retos que se presentan en nuestra profesión día a día, sea cohesionado, experimentado y con una trayectoria profesional que le permita manejar las diferentes áreas y frentes de ámbito colegial, institucional, tanto a nivel autonómico como estatal, entre otros, que se vayan presentando y sepa resolverlos y aportar soluciones adecuadamente.
No debemos olvidar que el colegio profesional es una institución de mucho peso para los/as profesionales, además de representar una garantía hacia la ciudadanía para una buena praxis profesional.
Nuestro colegio profesional tiene ante si una serie de retos que resolver y necesita un equipo con experiencia en la organización colegial. Un claro ejemplo lo tenemos en que el Colegio de psicólogos va a tener un peso muy importante en la creación del master en Psicología de la Salud –con el reconocimiento legal de profesión sanitaria–, así como el establecimiento de mecanismos extraordinarios para que los profesionales ejercientes puedan obtener este reconocimiento. Esta situación en la que nos encontramos y que –a día de hoy– afecta a muchos profesionales hace necesario que el Colegio tenga un equipo de gobierno con un conocimiento profundo de esta problemática y capacidad de respuesta eficaz ante la Administración.
Como decano en funciones pediría a los componentes de ambas candidaturas que hagan un esfuerzo para que la campaña electoral sirva únicamente en beneficio del enriquecimiento de la entidad colegial y que las candidaturas aporten ideas, nuevos proyectos y propuestas concretas y elaboradas y que sea un proceso de madurez de todos/as los/as colegiados/as en el que se antepongan los intereses de la profesión, del colectivo, del Colegio y del consejo ante cualquier otro tipo de intereses.
El Colegio somos todos nosotros y de nosotros depende que así sea.
(*) Decano en funciones del COPIB
