Penya Roja

Esta excursión se inicia en la localidad de Alcúdia, donde los visitantes cuentan con un espacio para estacionar sus vehículos y emprender la ruta a pie. La primera parada es la Ermita de la Victoria, un santuario histórico del siglo XIV de estilo barroco. Siguiendo una senda trasera, se llega hasta la cima de Penya Roja, un espacio con vistas impresionantes, pero no recomendado para personas con vértigo o niños por sus dificultades de acceso. La excursión tiene una duración aproximada de 2 horas.

Puig de María

Este enclave situado al sur de Pollença es una gran elección para disfrutar de la naturaleza y de la historia de la isla. Esta excursión es perfecta para realizar en familia, ya que es sencilla y de corta duración. La subida se inicia con un tramo de carretera y otro pequeño recorrido que se debe realizar a pie. La duración es de aproximadamente una hora. Una vez en la cima, los excursionistas pueden visitar el refugio del Puig de Maria y una ermita del siglo XIV. Este sendero ofrece vistas panorámicas de Pollença y la Serra de Tramuntana.

Mirador del nudo de la corbata

Situado en la carretera de Sa Calobra, esta visita es perfecta para los amantes de la naturaleza y la fotografía. Este mirador es el resultado de la obra del ingeniero Parietti, una carretera que permite observar el paisaje montañoso de la Serra de Tramuntana y la costa de la zona oeste de la isla. Además, la ruta finaliza en un pequeño puerto y la conocida playa del Torrent de Pareis. Se puede acceder al mirador en coche o autobús aunque la carretera es dificultosa por sus curvas y pendientes.

Mirador del Puig de Randa

También conocido como el Santuario del Cura, este mirador situado en el centro de la isla permite una excursión para disfrutar de las mejores vistas de la zona interior de Mallorca y conocer su historia. Los excursionistas pueden visitar la Ermita de Sant Honorat, el Santuario de Nostra Senyora de Gràcia y el Santuario de Nostra Senyora de Cura. Además, lo más relevante de esta excursión son sus vistas panorámicas, y es que su localización en el plano interior del territorio, permite una visión de 360 grados.

Es Colomer de Formentor

Una de las visitas imprescindibles dentro del Cabo de Formentor, situado al noreste de la isla. El mirador ofrece vistas panorámicas a más de 200 metros de altura. Se puede acceder en coche y cuenta con espacios de estacionamiento cercanos. Los visitantes cuentan con un camino señalizado para disfrutar del paisaje montañoso junto los acantilados. Además, ofrece vistas con la isla de Menorca al fondo. La realización de esta ruta se recomienda en horas tempranas o fechas de bajo turismo para evitar las aglomeraciones.