Dani, un joven de 16 años, arriesgó su integridad física por defender a una mujer maltratada. Estaba esperando el tren en Palma de Mallorca y en la estación vio como otro joven discutía y golpeaba a una chica. Dentro del tren siguió pegándole mientras ella lloraba. La joven incluso quiso bajarse, pero el hombre se lo impidió. Entonces Dani la defendió. El agresor le dio un puñetazo, un mordisco, lo tiró al suelo y le propinó varias patadas en la cabeza. Aún está en shock. El atacante huyó.