Toda Cádiz salió a la calle, se escuchaba por cualquier rincón de la Tacita de Plata: ?Que viva Cádiz suene y vuelve a sonar?. La multitud salió a a calle para festejar estos carnavales; incluso los balcones se llenaron. Porque en Cádiz lo de la risa se lo toman muy en serio. Le ponen alma y ganas. No hay duda, el mejor carnaval está en la calle.