Mallorca ha superado ampliamente los niveles de lluvia normales a estas alturas del año. "Desde el 1 de enero contabilizamos 259 litros por metro cuadrado en toda Mallorca de valor medio. Lo normal es que caigan 529 litros durante un año, así que estamos por encima de la media", explicó ayer María José Guerrero, delegada territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Balears.

La jornada estuvo marcada por precipitaciones intensas, persistentes y acompañadas de barro que se repitieron hasta la noche. A mediodía habían caído doce litros por metro cuadrado en Palma y diecisiete en Valldemossa. Las temperaturas no superaron los dieciocho grados en ningún punto de Mallorca, y las mínimas bajaron hasta los ocho o nueve grados en áreas de la Serra de Tramuntana.

Y llueve sobre mojado. Las precipitaciones caídas en los últimos días han llenado los embalses al máximo de su capacidad, lo que ha provocado algunos desbordamientos. Desde el jueves por la noche, el del Gorg Blau vierte agua al torrente de sa Fosca y al torrente de Pareis. El viernes por la mañana también se desbordó el de Cúber. La dirección general de Emergencias del recomendó no realizar barranquismo ni otras actividades en los cauces de estos torrentes el fin de semana.

Pese a la cantidad de lluvia caída, apenas hubo que lamentar incidentes en Mallorca en la jornada de ayer. El Consell cerró un carril de la carretera Ma-10 entre Banyalbufar y Estellencs debido a la caída de un muro en el tramo. La lluvia también derribó un 'marge' en Establiments, lo que obligó a movilizar a Bomberos y a la Policía Local.

El tiempo cambiará radicalmente en la jornada de hoy, cuando se esperan cielos despejados y temperaturas en ascenso con unas máximas que se situarán por encima de los veinte grados durante el mediodía prácticamente en toda la isla.

Será un pequeño respiro porque la inestabilidad podría volver a partir de mañana en forma de más precipitaciones.