La Audiencia de Palma ha ordenado que una niña, que fue trasladada ilegalmente por su madre a Mallorca, sea devuelta a su país de origen, Bolivia, para que se reencuentre con su padre, que denunció su macha a un país extranjero.

La decisión del tribunal no hace más que confirmar una anterior sentencia, acordada por uuna juez de primera instancia, que atendió la demanda presentada por la abogacía del Estado, que salió en defensa del padre, que en su país denunció la sustracción de su hija, a la que hace más de un año que no ve.

La madre, que es también boliviana, se opuso a la demanda de su exmarido. Apeló a que la niña estaba perfectamente integrada en Mallorca y que además el padre conocía perfectamente donde residíala menor, por lo que no podía hablar de que se había cometido una sustracción. También detallaba que la menor estaba escolarizada en la isla y que si ahora dejaba el curso y regresaba a su país, lo que le produciría es un quebranto en su formación.

El tribunal cuestiona que el padre conociera, o hubiera sido informado previamente, del paradero de su hija, entre otras cosas porque la niña fue localizada por la Policía a través de una orden de Interpol. También rechaza, como alegó la madre para evitar su regreso a su país, que esta mujer esté sufriendo un trastorno delirante de personalidad coo consecuencia de la difícil relación que tuvo con su exmarido. Los jueces creen, como señalan los informes médico, que este trastorno se trata con fármacos y no es motivo para que la menor no regrese a Bolivia para poder mantener una relación con su padre.