La Universitat de les Illes Balears (UIB) ha cerrado el expediente abierto a Miguel Deyá, decano de la facultad de Filosofía y Letras, por retirar una bandera estelada en un acto de protesta organizado por algunos estudiantes para mostrar su apoyo a la celebración del referéndum del 1 de octubre en Cataluña.
Fuentes oficiales de la UIB no quisieron dar ayer muchos detalles (como suele hacer con los expedientes), pero confirmaron que las diligencias informativas se han dado por clausuradas y que no se ha considerado pertinente interponer sanción alguna.
La actuación cuestionada del decano y exdirector general durante la anterior legislatura del PP tuvo lugar el pasado 22 de septiembre. Algunos alumnos de la Universitat organizaron un acto para mostrar su simpatía y apoyo al referéndum independista organizado en Cataluña el pasado 1 de octubre. Varios profesores participaron también. En principio a los estudiantes se les había dado permiso para realizar la concentración en los exteriores del campus, donde realizaron una votación simbólica para defender el derecho a decidir. Finalmente la protesta se trasladó al claustro del edificio Ramon Llull, sede de la facultad de Filosofía y Letras.
Los alumnos colgaron una bandera estelada en la estatua de Nuredunna ubicada en el centro del claustro así como una papeleta con un 'sí'.
Deyá intervino para retirar la bandera y la papeleta y los estudiantes volvieron a ponerla. El decano la retiró por segunda vez y habló con los alumnos que desistieron de volver a colocarla.
Algunos estudiantes participantes acudieron a quejarse ante la Síndica de Greuges por la actitud de Deyá al considerar que se estaba censurando su protesta. También hubo miembros del Consell de Govern que expresaron su malestar por la actuación del decano. Finalmente, el profesor y exdecano Nicolau Dols formalizó su queja por escrito, al considerar que el decano se había extralimitado en sus funciones, lo que dio pie a la apertura de un expediente informativo a Miguel Deyá.
El decano alegó que retiró la bandera al encontrarse en un edificio público y porque no se trataba ni de un símbolo oficial ni un símbolo compartido por la mayoría de miembros de la facultad. Asimismo, Deyá recordó que los estudiantes no tenían permiso para realizar la protesta dentro del edificio.
La Universitat parece haber tenido en cuenta estos argumentos y finalmente, más de cuatro meses después, ha zanjado el expediente informativo sin sancionar al profesor de Historia.
La concentración del día 23 de septiembre fue convocada por el Consell d'Estudiants y las organizaciones Estudiants en Xarxa; Idees y Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans. Asistieron un centenar de alumnos y también se sumaron algunos profesores y cargos políticos. Por ejemplo, estuvieron presentes en la votación simbólica Laura Camargo, diputada de Podemos y profesora en la facultad de Filosofía y Letras y el vicepresidente del Consell, Jesús Jurado, también 'podemita'.
Una semana después de este acto, los estudiantes organizaron una jornada de huelga y de nuevo hubo un encontronazo entre el decano y los estudiantes.
La sede de la facultad de Filosofía y Letras suele ser el epicentro de las reivindicaciones estudiantiles en la Universitat. La última fue hace pocas semanas: una acampada en protesta por la confirmación de la condena al rapero Valtonyc.
