­La Sala de lo Civil del Tribunal Supremo ha declarado firme la sentencia de la Audiencia Provincial de Sevilla que acordaba que un camarero mallorquín de sesenta años de edad que no fue reconocido por su padre, natural de Utrera, pueda recibir una herencia millonaria, valorada en más de dos millones de euros, tras declarar inadmisible el recurso de casación presentado contra la citada sentencia. El demandante nació fuera del matrimonio tras la relación entre su padre y una sirvienta que trabajaba para él en su casa.