Trump prueba cada día que un tuit basta para inquietar a mucha gente. Aquí, lejos de Donald, alumnos y profesores de 2º de Bachillerato han tenido su ración de susto esta semana por un tuit de un alumno del grado Lengua y Literatura Española de la UIB. El mensaje empezaba digiriéndose "a los del 2.000" (que este año ya alcanzan la mayoría de edad y hacen Selectividad) (sí, muy fuerte). El joven se identificaba como estudiante de Filología Hispánica (antigua denominación de estos estudios) y avisaba: "Doy clase con una de las personas encargadas de confeccionar el examen de Castellano de Selectividad. Hoy hemos hablado de dicho examen en clase. ¡Os vais a cagar!". Casi 50 retuits y 80 'me gusta' después, los nervios ya se habían dispersado entre un colectivo (el de alumnos de 2º de Bachillerato) que este año ya está suficientemente nervioso.
Desmontando el tuit
Calma. El tuit-advertencia ya ha sido borrado. Desde la UIB tanto la coordinadora de los exámenes de Castellano, Ruth Miguel, como el nuevo Secretario Técnico de las pruebas de acceso ( PBAU), Joan Antoni Mesquida, lo han desmontado, empezando por señalar que la profesora citada no se encarga de diseñar las pruebas. Además, aclaran, no se habló del examen concreto que se pondrá el próximo junio (sería una falta grave y, además, de ser imposible ya que hasta el mismo día del examen ni la propia coordinadora conoce el modelo exacto al que se enfrentarán los estudiantes) sino del formato de la prueba, que es público y está colgado en la web de la UIB para que los institutos puedan consultarlo. Estos fueron los argumentos que se le expusieron al chaval para que suprimiera o rectificara el tuit, algo que el joven hizo, además de pedir disculpas.
Los antecedentes
Este pequeño episodio de alarma llega pocos meses después de que se difundiera que los alumnos de Balears que hicieron Selectividad el pasado junio obtuvieron la nota promedio de Castellano más baja de todo el país. Aunque la comparación con otras autonomías es algo tramposa ya que cada comunidad diseña y evalúa sus propias pruebas, el tema llegó al Parlament y el conseller March aseguró que analizarían la situación junto a la UIB. Incluso recordó que un grupo de profesores hizo un escrito quejándose de que había sido demasiado difícil.
Un examen más corto
Efectivamente la UIB y la conselleria de Educación, a través del director general Juanjo Montaño, han hablado sobre este tema y el año que viene habrá novedades en las pruebas de Castellano. Mesquida señala que, aunque no todo el mundo tuvo la percepción de que había sido especialmente difícil, para las próximas PBAU han revisado la extensión del examen al constatar que muchos aspirantes no tenían tiempo de acabarlo.
La web de la Universitat ya expone las novedades del formato que se aplicará el próximo junio: habrá una pregunta menos del comentario de texto y los temas que se preguntarán en la parte de Literatura son mucho más breves y sintéticos y, en lugar de elegir uno de dos, tendrán cuatro opciones para escoger dos. La puntuación se ha cambiado también, buscando un reparto más equitativo entre las distintas partes (comentario; redacción; lengua y literatura).
Los profesores del Antoni Maura, contra el Institut d'Ensenyaments a Distància
Educación presentó ayer una de sus grandes novedades a los sindicatos: la creación del Institut d'Ensenyaments a Distància (IEDIB). El día de antes, UOB Ensenyament ya lo había calificado de "fracaso previsible" y de "estrategia de marketing de cara a las elecciones".
Desde CCOO, han pedido que su arranque sea gradual y que en ningún caso suponga un "sobresalto" para los profesores que a día de hoy ya imparten formación a distancia. Mencionaron el caso del instituto Antoni Maura, que desde 1995 oferta estudios de ESO, Bachillerato y un grado superior de FP de Educación Infantil en modalidad semipresencial.
Estos docentes se reunieron en asamblea el lunes y acordaron un escrito recordando que todos estos años han montado el sistema prácticamente solos, sin acompañamiento ni apoyo por parte de la administración.
Ante el anuncio de creación de este nuevo instituto, estos docentes ven la modalidad semipresencial "gravemente amenazada" y advierten de que "buena parte" del alumnado actual "no está en condiciones de seguir una formación exclusivamente online", con lo que el nuevo instituto podría suponer la exclusión del sistema de "una parte importante de sus potenciales usuarios".
Apoyan mejorar y amplicar la oferta a distancia, pero no la estrategia seguida por la conselleria de Educación, a laque critican un "exceso de urgencia y defectos de transparencia voluntad de consenso". Con todo, el claustro de profesores piden mantener íntegramente y potenciar la oferta actual del Antoni Maura (dirigido por Myriam Fuentes, colega y uno de los referentes directivos para Antoni Morante, director general de Planificación, Ordenación y Centros ).
