Particulares de Mallorca han arrancado por precaución más de 8.050 plantas y árboles ante la llegada de la Xylella fastidiosa a la isla. Estos miles de ejemplares han sido eliminados por los propietarios de los cultivos por prevención y para evitarse problemas futuros.
La cifra de positivos detectados es en realidad mucho menor: desde octubre de 2016 hasta ahora en Mallorca se han detectado 412 positivos y el 85% ya ha sido eliminado. En toda Balears, se ha confirmado la presencia de la bacteria en 627 ejemplares, de los que 450 ya han sido suprimidos.
Así, en Mallorca de las 2.099 muestras analizadas, el 20% han resultado positivas. En el caso de los almendros, se han confirmado 146 positivos. Es la especie más afectada: casi el 50% de las muestras analizadas tenían Xylella. También se ha encontrado en 117 acebuches, en 54 viñas y en 35 olivos.
Estos son algunos de los datos que presentó ayer Omar Beidas, jefe de sección en la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, en el seminario organizado por el Instituto de Investigaciones Agroambientales y de Economía del Agua (INEGEA) en la Universitat. Casi de forma simultánea, el conseller Vidal se reunía ayer con los alcaldes para exponerles el estado de la cuestión.
Un porcentaje notable
Entre otros aspectos, Beidas resaltó que el porcentaje de positivos confirmados respecto a las muestras tomadas (un 15%) es notable y señaló que de las plantas clasificadas como de "alto riesgo" por la Unión Europea, Balears las tiene todas excepto el café. Recordó que se han detectado tres subespecies de Xylella en Mallorca. Destacó que la Serra aparece como zona libre de esta bacteria y aseguró que no es porque no se hayan tomado muestras en la zona.
La semana pasada inspectores de la Unión Europea visitaron Mallorca y Eivissa para supervisar la aplicación de las medidas de contención decretadas (Europa declaró Balears como zona de contención en diciembre de 2017, aunque según Beidas ya "nos lo habíamos autodeclarado antes"). El técnico de la conselleria señaló que el balance de la visita de la comisión europea de seguimiento fue positivo, que pareció estar coforme con las medidas adoptadas para evitar la dispersión de la bacteria, como la prohibición de sacar de Balears ejemplares de las especies afectadas (excepto las semillas).
Más de 40 plantas incautadas
Para evitar salidas, se colabora con la Guardia Civil para controlar los movimientos de mercancía vegetal; se han llevado a cabo sesiones de formación para el personal de los puertos y aeropuertos y se han distribuido carteles informativos en estas infraestructuras. Desde junio de 2017, de las notificaciones de salida de material vegetal se han incautado 45 plantas especificadas.
Entre futuras medidas a adoptar, Beidas anunció que en las próximas semanas la conselleria pondrá en marcha una campaña de distribución de productos fitosanitarios gratuitos entre los productores de almendros, olivo y vid, para garantizar que en este sentido estos cultivos estén en correctas condiciones.
Más protección en algunas zonas
Asimismo, el jefe de Sección I de la dirección general de Agricultura indicó que se van a delimitar zonas de "especial valor cultural, social o científico" para las que se harán planes específicos de protección para evitar que la bacteria entre. Por ejemplo, se hará un plan especial por zonas para la Serra.
Durante su intervención, el técnico de la conselleria indicó que gracias al Impuesto de Turismo Sostenible se impulsará un proyecto a tres años (con un presupuesto de 1,5 millones de euros) para investigar distintas cuestiones sobre la Xylella, como el estudio de los insectos vectores o la implantación de sistemas de detección con drones.
Otra acción que impulsará próximamente la Conselleria será la inoculación de la bacteria en ejemplares de distintas especies para estudiar su tolerancia y susceptibilidad. La experiencia se llevará a cabo en invernaderos acotados y debidamente controlados y para ello se colaborará con la Junta de Andalucía, que enviará material vegetal de distintas especies y variedades para estudiar su respuesta a la bacteria.
