El tiempo medio que destinan las mujeres de Balears a las labores domésticas sextuplica a lo que dedican los hombres. De esta forma, si las mujeres consagran cuatro horas y media, los varones apenas 45 minutos. Una desigualdad comparable a la que se produce en el cuidado de hijos pequeños, con una proporción de tres horas y cuarto de dedicación de las madres, frente a los 45 minutos de los padres.

Así lo refleja el último estudio de Quaderns Gadeso, correspondiente a este mes y que forma parte de los monográficos publicados con motivo del Día Internacional de la Mujer. El análisis demoscópico se centra en aspectos como la conciliación, el papel de la mujer en la vida laboral y familiar, así como la violencia de género.

El estudio constata que la división de responsabilidades entre hombres y mujeres continúa vigente, a pesar de que éstas también tengan un trabajo que les exige estar fuera de casa.

En este sentido, casi la mitad de los encuestados cree que son las madres las que tienen que pedir un permiso de maternidad, frente al 5,3% que considera que deberían ser los padres. Un 22,2%, en cambio, opina que los dos cónyuges deberían pedirse un permiso cuando sean padres.

Educación de los hijos

El hecho de que la combinación de las tareas domésticas y la educación de los hijos con las responsabilidades profesionales sea más un quebradero de cabeza para las mujeres que para los hombres se refleja en el siguiente dato contenido en el análisis de Gadeso.

El 58,4 de las mujeres sostiene que la conciliación de la vida familiar y laboral es "complicada o muy complicada"; un porcentaje que se reduce significativamente en el caso de los hombres (un 49,5%). Entre estas mujeres que resaltan la dificultad de conciliar, la mayoría (63,5%) trabaja fuera de casa. Respecto al acceso al mundo laboral, el 64% de los ciudadanos cree que la mujer tiene más dificultades que el hombre para conseguir un puesto de trabajo. "Los motivos tienen mucho que ver con situaciones como la posibilidad de embarazo, así como con que la mujer suele hacer frente a cualquier emergencia en el ámbito familiar", puede leerse en el último número de Quaderns Gadeso.

Otros datos corroboran esta realidad, como el hecho de que el 47% de consultados sostenga que la mujer lo tiene más difícil que el hombre para acceder a un mismo trabajo, o bien que un 62% no tiene duda de que las féminas tienen un sueldo inferior al de ellos por realizar un trabajo de idénticas características.

Trabajos menos cualificados

"Estas situaciones afectan al conjunto de mujeres pero no hay duda de que las más afectadas son las que ocupan las franjas de trabajo menos cualificado. En el caso de profesionales de cargos directivos, esta discriminación, aunque exista, es menor", concluye Quaderns Gadeso.

Medidas de conciliación

Otro aspecto que se centra a analizar la encuesta son las repercusiones que pueden tener las medidas de conciliación en el trabajo. En este caso, tanto las mujeres como los hombres aseguran, con distinta intensidad (el 46% de ellas y el 53% de ellos), que el uso de estas medidas "provoca conflictos en el ámbito laboral". Unos datos que llevan a Gadeso a determinar que se trata de un ejemplo de que el empresario aún interpreta la aplicación de estos derechos laborales como un "coste añadido que, de alguna manera, quiere transferir al trabajador".

La mayoría de personas que han empleado algunas de estas medidas de conciliación trabajan para la administración. Y son, sobre todo, las mujeres (un 33,5% frente al 4,5% de los hombres) quienes las solicitan.

En el marco del número dedicado a la brecha de género, el análisis sociológico de Gadeso detiene su foco sobre el fenómeno de la violencia sexista. La mayoría de encuestados (un 60%) considera que, por su frecuencia, se trata de un problema que afecta "a toda la sociedad", aunque el 42% opina que incumbe especialmente a "segmentos sociales y conflictivos" y el 36% afirma que se trata de "casos individuales".